19 de julio de 2009, 2:00
En el mundo del fútbol es bueno tener dosis, y a veces sobredosis de esta filosofía porque los aficionados quieren fichajes rápidos, los periodistas fichajes mediáticos, los representantes presionan a los equipos con los jugadores deseados, pero a un precio alto; el entrenador los quiere para el inicio de la pretemporada y el presidente y los directivos lo quieren todo (abonados, jugadores buenos, baratos y mediáticos y, además, ajustarse al presupuesto) pero a su vez 'la paciencia' puede ser un gran defecto:
Fichas lo que quieres o lo que te dejan.
Tienes tranquilidad o miedo a tomar decisiones.
Decides o las circunstancias hacen decidir por el club.
Dominas las situaciones (representantes, futbolistas, presupuestos y posibles cesiones de otros clubes) o la ansiedad te paraliza.
No es lo mismo tener fichado al día de hoy cuatro jugadores que diez.
Por eso os decía más arriba, en el titular: paciencia, una virtud o un defecto.
Fichas lo que quieres o lo que te dejan.
Tienes tranquilidad o miedo a tomar decisiones.
Decides o las circunstancias hacen decidir por el club.
Dominas las situaciones (representantes, futbolistas, presupuestos y posibles cesiones de otros clubes) o la ansiedad te paraliza.
No es lo mismo tener fichado al día de hoy cuatro jugadores que diez.
Por eso os decía más arriba, en el titular: paciencia, una virtud o un defecto.