4 de noviembre de 2013, 9:03
Ese es el título de este comentario, recién llegado de la ciudad hispalense, donde se acaba de conseguir la séptima victoria consecutiva, no sin sufrimiento, eso sí (seis en liga, -igualando récord- y una en Copa) y cuando, hace unos días, comentaba en mi artículo anterior : “Lo que se avecina”, queridos amigos cartageneristas, vemos que la sensación es óptima, vistos los resultados. Es posible que, en determinados momentos, la suerte nos haya acompañado, pues ¡albricias!, bienvenida sea, ya era hora que esto ocurriese y digo esto, porque a los equipos a los que nos hemos enfrentado, sabiendo la filialidad con “sus grandes”, su fin y la dificultad que entrañan, se ha saldado con un éxito total de resultados, a sabiendas que en pasadas temporadas nunca, o casi nunca, se lograron tales resultados y sabido es que tales equipos son auténticas bombas de relojería; de lo cual, obviamente, nos congratulamos enormemente, de ahí el título
Y en ese estado de ánimo, de aumento en espiral moral y deportivo, viene, el próximo viernes, el sorteo de Copa, esperado ansiosamente por todos los aficionados que, año tras año, sobre todo últimamente, no hemos llegado a alcanzar esta alegre y expectante situación; por lo tanto, espero y deseo que nos siga acompañando la suerte, evidentemente –y esto es muy importante- no exenta del grandísimo trabajo que están haciendo cuerpo técnico y chavales y que nos llevará a ver a algún “grande de España”, con todo lo que ello rodea; ahora mismo, lograr esa estabilidad económica, en esta temporada, que dará paso, con toda seguridad, a mayor tranquilidad a los “actuales guerreros cartagineses” para el logro pretendido y para satisfacción de nuestro Presidente-ejecutivo y aficionados que ven progresar a su querido equipo.
Esto pues continúa, -queda mucho camino por recorrer-, esperando prolongar la racha, -buenísima racha-, para afianzarnos en esas posiciones de privilegio que es donde queremos ver siempre a nuestro equipo y, si es posible, en una categoría superior. Esa es la dirección.
¡Hasta la próxima amigos, salud y suerte, como siempre!.
