El fichaje de Braulio por el Cartagena está dando mucho que hablar en estas primeras horas como futbolista blanquinegro. Su pasado reciente no juega a su favor pero yo, sin más dilaciones, quiero recordar que todo el mundo es inocente hasta que no se demuestre lo contrario. En España existe la presunción de inocencia y ese derecho lo recoge la Constitución.
No paramos de recibir mensajes, muchos a favor pero otros muchos tambièn en contra y hasta algunos que rozan, si es que no trasgreden, una línea de violencia que desde luego no podemos permitir. Opinar, sí, pero con respeto y sin amenazas como uno que hemos borrado en el que se decía que "si me lo cruzo por la calle, le parto la cara". Inadmisible.
Su llegada a Cartagena va a dar la vuelta a la España futbolística en pocas horas. ese turbio pasado no juega a su favor pero, curiosamente también 'gracias' a ese error admitido por el propio jugador ha podido fichar por el FCC. Y digo más, que toda persona tiene derecho a una segunda oportunidad. Podría ser este el caso. O no. No lo sé pero tampoco voy a ponerme abiertamente en contra de un futbolista bueno, muy bueno y con olfato goleador por un grave tropiezo en lo personal. Otros futbolistas tambièn se han equivocado en su vida personal en mayor o menor medida pero luego rectificaron gracias a una segunda oportunidad que la supieron aprovechar.
Me supongo que Braulio sabe lo mucho que se juega en Cartagena, más en lo personal que en lo futbolístico. Y si lo primero funciona lo segundo estoy seguro que también. Y si es así pronto tendrá el calor de la gente y más de esta afición tan extraordinaria que tenemos en Cartagena.
Braulio se equivocó en su momento y bastante se habrá arrepentido en todos estos meses que ha pasado en el ostracismo. He conocido casos parecidos de acusaciones que después se han demostrado que era lo contario. ¿Os acordáis de aquellos tres futbolistas del Leicester City que fueron acusados en La Manga Club por tres señoritas de intento de violación? Pues bien en el juicio se demostró que no había pruebas, quedaron absueltos en un Juzgado de Cartagena y pudieron continuar con su carrera en el fútbol inglés, acostumbrado a este tipo de incidentes.
Aquella historia también fue espectacular con los tres jugadores del Leicester City acusados de haber agredido sexualmente a tres mujeres en el complejo hotelero de La Manga Club que mantuvo ocupada a la prensa británica durante un montón de días haciendo guardia en el Palacio de Justicia de la calle Ángel Bruna. Hasta que el tabloide sensacionalista The Sun afirmó que la investigación por los cargos presentados contra Paul Dickov, Frank Sinclair y Keith Gillespie se cerrarían, tras confirmarse que el desagradable incidente se trató de un montaje de las demandantes.
Los futbolistas del Leicester acusados de violación volvieron a ser titulares y el Leicester volvió a convocar a los tres jugadores acusados de agresión sexual a pesar de que estos incluso llegaron a Ingresar en la prisión de Sangonera durante varios días. Yo no digo que sea el mismo caso ni voy a comparar pero Dickov, Sinclair y Gillespie siguieron con sus vidas tras haberse probado que las tres mujeres, Ruth Lourenco, Beatrice Wanjiro y Martha Wilbert habían mentido.
No trato de decir que sean falsas esas denuncias contra Braulio, Dios me libre porque él mismo lo reconoció. Lo único que deseo es que Braulio marque muchos goles, que lleve una vida normal y que sepa aprovechar esta segunda oportunidad que le brinda la vida. Pedro Reverte, director deportivo, y el dueño Paco Gómez, esta vez tambíèn han apostado fuerte porque muchos ojos van a estar pendientes de lo que haga y de lo que no haga Braulio, al que yo le deseo toda la suerte del mundo.
