El portero Aulestia, considerado uno de los puntales del equipo amarillo, renovó por una temporada al superar los 25 partidos jugados que le hacían falta para continuar la campaña 1012-2013.
Wilfried Moke tiene un año de contrato por delante, al igual que el canterano Dieguito. Además de esa terna, el Cádiz tiene hasta el día 30 -próximo sábado- para recuperar a Lolo Armario, que salió cedido en enero al Écija Balompié.
Otros seis jugadores que pertenecen al Cádiz terminan contrato el próximo sábado. Son Serrano, Baquero, Juanse, José Miguel Caballero, Aranda y Enrique. Este último, que no ha tenido ficha al estar lesionado, se retirará del fútbol.
Según Diario de Cádiz, hay inseguridad en el club cadista tras no lograr el ascenso a Segunda A afecta a tres vertientes: económica, deportiva e institucional.
A PAGAR CON CELERIDAD
La económica pasa primero por abonar, antes del próximo domingo, los cerca de 20.000 euros que adeuda a los cinco jugadores que han denunciado al club por impago ante la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE). El Cádiz tiene que hacer frente también, antes del 5 de julio, al pago de un aval de 200.000 euros para poder competir en Segunda B el curso que viene.
El apartado deportivo está pendiente del posible acuerdo entre el accionista mayoritario, Antonio Muñoz, y Quique Pina. El empresario murciano ha elevado sus condiciones para seguir vinculado al Cádiz, aunque todo apunta a que ambas partes llegarán a un acuerdo para que Pina diseñe un nuevo proyecto ambicioso que tendrá como base la plantilla de la temporada recién terminada, con un nuevo cuerpo técnico que dará a conocer en cuanto haya fumata blanca.