PEDRO ANTONIO GARCÍA
Todas las miradas estaban puestas en ver si el ‘7’ del Minerva, un ‘tal’ Cristo Martín, era tanto como su fama le precedía. Con la camiseta azulgrana minervista parece otro pero la verdad es que, conforme iban pasando los minutos, Cristo sigue siendo el mismo que encandilaba en el Cartagonova y fuera de él. Y en el ‘Heliodoro Rodríguez López’ tinerfeño, la cuna de sus éxitos, que ahora ha cambiado por el modesto campo de El Secante que, eso sí, le recibía con los brazos abiertos.
Cristo empezó jugando en su demarcación habitual. Juan Lillo, el entrenador minervista que aún se restriega los ojos con un refuerzo tan importante, le conoce bien. Y le anima desde el banquillo, le da instrucciones. Cristo es un viejo zorro que, pese al año de inactividad, no se le ha olvidado darle a la pelota.
Cristo, además de marcar y dar otro gol, fue el que mandó sobre el campo a sus compañeros/Foto SCT
Se notaba cada vez que cogía el esférico la calidad que atesoran esas botas, haciendo alarde de sus habilidades en cada acción. Se vieron pinceladas de calidad al inicio del encuentro cuando se zafó por la banda de dos defensas y puso un balón al centro del área que nadie pudo rematar. Incluso se permitió el lujo de hacer algún sombrero a lo largo del encuentro.
Durante la primera parte fue muy incisivo por la banda, desbordando y dando buenos pases, demostrando a todos lo que es, un crack. El partido estuvo bastante ajustado desde el principio, presionando fuerte el Minerva, pero el Churra sabe cerrar muy bien los espacios.
Otra acción del tinerfeñó Cristo, que tiene revolucionado al pueblo de Alumbres/Foto SCT
Fue al inicio de la primera parte cuando abrió la lata en un remate en el centro del área y desató aún más si cabe a una grada que desde el minuto uno estuvo totalmente entregada a él.
Cristo además estuvo muy activo en defensa, robando dos balones a lo largo del encuentro, lo que no hace sino acreditar el tipo de jugador que es. Las mejores palabras con las que se le puede definir son talento y garra. Este jugador va a traer más de una alegría a una afición que se entrega mucho en cada encuentro.