Las multas y las sanciones a los aficionados van desde los 3.500 a los 7.000 euros y del medio año a los dos años de prohibición de acceso a cualquier recinto deportivo.
Dos de los hinchas radicales fueron detenidos y el resto identificados por la Policía. Los primeros se enfrentan a un proceso penal, mientras que los segundos recibirán una sanción administrativa por parte de la Subdelegación del Gobierno.
El clásico gallego registró una serie de incidentes desde la misma llegada del autobús del Deportivo al estadio del Celta, donde fue recibido con una lluvia de objetos por los hinchas radicales del conjunto vigués.
Asimismo, algunos aficionados celestes se enfrentaron, agredieron y lanzaron objetos, como botellas de vidrio y una baldosa de la acera, a los agentes policiales, que tuvieron que realizar varias cargas antes y después del choque para dispersar a los radicales. Algunos de los agentes precisaron atención médica, informa Faro de Vigo.
