Los catalanes necesitaban ganar por dos goles de diferencia para seguir vivos y lo hicieron. Un golazo de Borja García en la primera jugada del partido y otro nada más comenzar la prórroga de Stuani permitirán a los de Michel disputar la eliminatoria definitiva.
El Eibar, que estuvo hasta 28 jornadas en puestos de ascenso directo durante el curso, completó su semana maldita y después de perder el ascenso directo en Alcorcón, vio cómo también se le escapaba la vía de los 'playoffs'. El partido de ida será el sábado 11 en Montilivi y el de vuelta, el domingo 19 en el Heliodoro Rodríguez López.
Los gerundenses aterrizaban en Ipurua con la obligación de ganar, como mínimo, por un gol de diferencia para forzar la prórroga. Y sólo tardaron 49 segundos en volver a poner las tablas en la eliminatoria. Borja García le quiso hacer la competencia a Aketxe y marcó un golazo de volea desde lejos que se coló por la escuadra de Cantero, cuya estirada no fue suficiente para evitar el tanto. El chute de moral con el que salió el Eibar de Montilivi desapareció y volvió el miedo a Ipurua.
El sopapo que se llevó el equipo de Garitano nada más arrancar el partido pesó durante gran parte del primer tiempo. No especuló el Eibar y quiso mandar en el partido. Tuvo más posesión que el Girona, pero le faltó claridad para generar ocasiones sobre la portería de Juan Carlos. Los catalanes exhibieron una gran seriedad defensiva con sus tres centrales y se impusieron en casi todos los duelos a los atacantes eibarreses. No hubo noticias de Stoichkov y Blanco Leschuk tampoco inquietó en el área rival.
Se le hizo eterna la última media hora al equipo de Michel, que vio cómo Juan Carlos volvió a vestirse de héroe para sacar bajo palos un balón que había tocado en un defensor y se colaba en su portería. Y cuando el meta de los gerundenses no llegaba a pararlas, el Eibar se encontraba con la madera, como en un potente derechazo de Stoichkov en el minuto 87 con todo a favor que se estrelló en el larguero y botó sobre la línea de gol, pero sin entrar.
El Girona celebraba la prórroga y como hizo en el primer tiempo, marcó en la primera que tuvo. Stuani marcó de cabeza en el área pequeña tras un córner de Aleix García prolongado primero por Juanpe, un gol que necesitó la aprobación del VAR, ya que en un primer momento fue anulado por fuera de juego. Tenía toda la prórroga por delante. Un gol le bastaba. Pero no lo encontró y se queda sin ascenso en una temporada en la que ha estado entre los dos primeros clasificados durante 28 jornadas. El Girona vuelve a soñar con Primera y buscará que a la tercera... sea la vencida.
