13 de octubre de 2011, 19:11
El hombre que, en las inmediaciones del estadio Cartagonova, agredió verbalmente al jugador Asier Goiría, del FC Cartagena, el 1 de octubre, tras el partido de los albinegros con el Alcoyano, ha sido multado con 3.500 euros y además no podrá acudir a recintos deportivos durante doce meses, según ha comunicado un portavoz de la Comisión Antiviolencia en el Deporte.
En el suceso fue testigo directo el también jugador del Cartagena, Dimas, que estaba en compañía de su pareja.
También se encntraba la esposa del jugador, quien también llegó a perder los nervios como resultado de la desagradable situación, que fue rèpudiada por muchos de los aficionados que presenciaron el hecho.
El lamentable suceso hizo intervenir a la Policía Nacional la tarde del 1 de mayo cuando Goiría fue insultado en presencia de varios familiares y de otros aficionados. El agresor fue conducido rápidamente a dependencias policiales y en menos de dos semanas se ha dado a conocer la resolución por quienes al amparo de la Ley le han impuesto un castigo por aquella lamentable intervención.
No cabe duda alguna de que se trata de un castigo ejemplar y un aviso a navegantes para que no vuelvan a repetirse hechos de esta naturaleza ni parecidos, como ha venido ocurriendo durante los dos últimos partidos en el estadio Cartagonova. El hecho de tener que pagar 3.500 euros ya es una dura sanción al igual de la pena de no poder presenciar ningún partido de fútbol durante un año en ningún recinto de España.
En el suceso fue testigo directo el también jugador del Cartagena, Dimas, que estaba en compañía de su pareja.
También se encntraba la esposa del jugador, quien también llegó a perder los nervios como resultado de la desagradable situación, que fue rèpudiada por muchos de los aficionados que presenciaron el hecho.
El lamentable suceso hizo intervenir a la Policía Nacional la tarde del 1 de mayo cuando Goiría fue insultado en presencia de varios familiares y de otros aficionados. El agresor fue conducido rápidamente a dependencias policiales y en menos de dos semanas se ha dado a conocer la resolución por quienes al amparo de la Ley le han impuesto un castigo por aquella lamentable intervención.
No cabe duda alguna de que se trata de un castigo ejemplar y un aviso a navegantes para que no vuelvan a repetirse hechos de esta naturaleza ni parecidos, como ha venido ocurriendo durante los dos últimos partidos en el estadio Cartagonova. El hecho de tener que pagar 3.500 euros ya es una dura sanción al igual de la pena de no poder presenciar ningún partido de fútbol durante un año en ningún recinto de España.
