25 de diciembre de 2011, 23:41
El actual es el quinto año que el Huesca, próximo rival del Cartagena, se mueve en Segunda con la particularidad de que siempre termina los ejercicios con superávit, el último de ellos dio 27.000 euros.
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En la junta general de accionistas del pasado miércoles 21 se volvieron a lucir un presupuesto ajustado y un superávit que sitúa a la entidad en el reducido grupo de clubes cumplidores y sin deudas.
En unos días, el club iniciará su quinto año natural en el fútbol profesional desde que con el ascenso del 15 de junio de 2008 se sumergiera en una aventura en la que los números han estado siempre muy presentes.
2011 aparecerá marcado en este sentido por la presentación del presupuesto de la temporada en curso, cifrado en 5.210.000 euros. Una cifra que es ligeramente inferior a la del año pasado y superior a la fijada para los dos primeros cursos en Segunda. Siempre se ha movido el Huesca en unas cantidades similares. Para el ejercicio 2010/11 se fijaron 5.339.000 euros; para el 09/10, 5.063.000, y para la campaña del debut, 4.600.000 euros, si bien el saldo final aumentó a algo más de 5.200.000 euros.
En todos los casos se dio un superávit. El más reciente, declarado el miércoles, de 26.907 euros, muy por encima de los 5.111 del estreno y por debajo de los 200.000 que se presentaron en la junta de 2010. Además, el balance de situación ofrece más de 800.000 euros de tesorería en el activo que redunda en la idea de un Huesca saneado. La partida más importante se destina al personal de club, incluidos futbolistas y técnicos, si bien dentro de unos parámetros racionales.
EL GRANADA PAGO 600.000 EUROS POR MIKEL RICO
Las distintas plantillas se han ido nutriendo de futbolistas bien libres, cedidos o en el paro. Ha habido operaciones complejas, como las de Rubén Castro y Tariq, y la única venta de Mikel Rico, al Granada por 600.000 euros, más el frustrado traspaso de Gilvan al Hércules.
En estos cuatro años, el Huesca ha acometido profundas reformas en El Alcoraz y acondicionado el campo del IES Pirámide por valor de unos cuatro millones de euros y con la ayuda del Gobierno de Aragón, que para este ejercicio ha fijado su subvención en un millón. Alrededor de cuatro brindó el anterior ejecutivo.
El club pudo asimismo resolver su conversión en Sociedad Anónima Deportiva (SAD): 2.625.000 euros repartidos en 17.500 acciones de las que el 66,24 pertenecen a una Fundación Alcoraz que contó con el colchón del patrocinio del Gobierno de Aragón en el verano de 2009.
La permanencia es ahora la meta para seguir creciendo con pasos pequeños pero seguros en clave económica y deportiva.
