La continuidad de JIM en el banquillo del Levante no solo resuelve todas las dudas, tanto propias como ajenas, que habían surgido en las últimas campañas. Además, supone un caso único en los casi 103 años de historia del Levante, que hasta ahora nunca había puesto en manos de un mismo técnico dos proyectos en la máxima categoría. Una vez sopesados pros y contras, el de Rabasa ha dejado clara su intención de continuar creciendo junto a la entidad azulgrana.
Quico Catalán y Manolo Salvador fueron los que escucharon el martes de boca del entrenador, vía telefónica, su deseo de iniciar otra temporada como granota. El director deportivo incluso se vio con él un día más tarde en Alicante, con la intención de atar cuanto antes los cabos que estaban sueltos en la planificación de la 12/13. Aunque ya antes habían permanecido ambos en contacto constante, ha sido en los últimos días cuando el de Rabasa se ha metido de lleno en la confección de la plantilla y la pretemporada del Euro Levante, con las exigencias que eso supone.
Juan Ignacio sabe que el reto es aún mayor en su segundo curso. Que por muchas plusmarcas positivas que haya logrado el equipo en los últimos meses, de nada servirán si los resultados no acompañan de ahora en adelante. Con la dificultad añadida de la participación en tres competiciones distintas.
Lo cierto es que ninguno de los nueve precedesores de JIM consiguió, por un motivo u otro, iniciar dos proyectos en la máxima categoría. Solo Abel y el legendario Quique Martín dirigieron a los de Orriols en dos campañas distintas en la Liga BBVA. Sin embargo, el primero cogió el equipo con la 06/07 empezada y lo dejó a principios de la siguiente campaña por los malos resultados.
El segundo, por su parte, se convirtió en el recurso desesperado en la promoción de descenso de la 64/65, después del exitoso dúo técnico que había formado con Balaguer en las temporadas del ascenso y el debut en la Liga BBVA. Luis García hubiera tenido la misma oportunidad que JIM hace un año, en caso de no haber aceptado la oferta del Getafe.
REVIVIÓ SU ETAPA EN EL CARTAGENA
Por otro lado el de Rabasa se reencontró el viernes con Toché y Mariano Sánchez, dos de los pilares de su etapa en el Cartagena. Tras hacer un paréntesis en sus vacaciones para cenar con Manolo Salvador, anteayer aprovechó para compartir mesa y mantel en Murcia con el actual delantero del Panathinaikos y el capitán del club cartagenerista, a los que dirigió las dos campañas previas a su llegada al Levante. JIM mantiene una amistad con ambos; se llegó a vincular su llegada al Levante con un interés por Toché.
