1 de mayo de 2014, 16:08
Sánchez-Seco Otero, árbitro madrileño con experiencia en Segunda B, tuvo que parar el encuentro Loja-San Fernando y pedir la intervención de
la Guardia Civil ante un suceso que llegó a preocupar. Y es que un recogepelotas, un chaval de 12 años, había sacado un arma blanca durante el encuentro y el chico fue interceptado por el delegado de campo cuando se dirigía al asistente número 2 del colegiado.
El propio árbitro escribió en el acta del partido, que ganó el San Fernando por 1-4 el 23 de enero de 2013:
"En el minuto 77 del encuentro, mi asistente número 2 me comunica que hay un recogepelotas del CD Loja con una navaja de aproximadamente 12 centímetros de hoja. Dicho recogepelotas se encontraba en situado fuera del terreno de juego a la altura del medio campo. Tras comunicármelo, hago llamar al delegado de campo para que avise a la Guardia Civil presente en las instalaciones. El recogepelotas se dirigía hacia mi asistente número 2 con paso firme, sin llegar verbalmente a dirigirse hacia él. Tras lo cual mi asistente se mete en el terreno de juego. El recogepelotas fue interceptado primeramente por el delegado de campo y posteriormente por las Fuerzas de orden público. Esta persona es menor de edad. Dicha incidencia fue reflejada también en el acta levantada por parte de la Guardia Civil".
