A expensas de un par de incorporaciones para reforzar la zona ofensiva, el entrenador asegura que tiene "un buen equipo" y sobre las dos llegadas que quiere, comenta que deben ser "dos jugadores que puedan venir al Alba y estén dentro de nuestro mercado económico. Tanto un medio, como un jugador de banda, un segunda punta o un punta". Pero, Sampedro también tiene claro que "no somos ricos para elegir. Tenemos que ir, observar lo que está en el mercado y ver si quiere venir", por lo que es el momento de "hilar muy fino y escoger bien".
Faltan tan sólo 22 días para el inicio de la competición y la Federación aún no ha comunicado ni los grupos, ni el calendario. Para Sampedro esto es "terrible", porque "si nos encontráramos geográficamente en otro lugar, al menos sabríamos en que grupo te colocas. Si eres catalán sabes que estás en el Grupo III, y en caso de gallego en el I, por lo que conoces a ocho, nueve o diez rivales". Pero estando aquí "no sabemos si tendremos que ir a Orense, Sanlúcar o Tarragona, no sabes nada y estamos muy perjudicados".
Una situación que tampoco ayuda a la hora de realizar las últimas incorporaciones, pues dependiendo del grupo, se puede buscar un perfil de jugador diferente, ya que "para jugar en el grupo vasco hacen falta futbolistas muy físicos, o en el III, jugadores que se adapten bien al césped artificial". Sampedro deja claro que "aquí no sabes nada y esto también influye a la hora de contratar. Estamos a la mano de Dios, no sabemos si la jornada uno iremos a Orense, El Palo en Málaga o Alcoy".
Por último, el entrenador gallego habló sobre la integración de los juveniles Candelas y Juanra que "están haciendo su trabajo, luchando y al nivel de los demás". El técnico sabe que la situación por la que pasa el club es muy complicada y por ello "tenemos que potenciar la cantera y para eso hay que abrirles la puerta. Si la tienes cerrada, no pueden entrar, y eso es lo que buscamos este año en algunas posiciones, abrir la puerta para que ellos den el paso al frente".
Aunque, Sampedro añade también que "si queremos presumir de cantera, nos gusta tener canteranos competentes", porque el Alba vive de ganar partidos y "no de poner medallas de cantera, ya que si no ganamos hay disgusto, aunque tengamos ocho canteranos en el campo". Según el entrenador blanco, el público quiere que el Alba gane y no le importa si "tenemos 11 rusos, al final te juzgan por ganar y no por tener a jugadores de la cantera. Si pierdes hay un disgusto terrible", pero "teniendo en cuenta todo esto, estoy contento con los canteranos".
