La verdad es que no es nuevo el hecho de que los equipos de Segunda B van adquiriendo deudas a lo largo de los últimos tres años. De un total de 27 clubes, al menos una decena son del Grupo IV.
Y es que los problemas económicos hacen peligrar los cimientos del fútbol modesto, cada vez más endeudado. La burbuja ha explotado también en el deporte rey, y los clubes ya no pueden pagar los sueldos astronómicos que tenían sus jugadores. Era cuestión de tiempo, como aquel que cice...
La RFEF dio en su día el listado de los equipos que tienen que avalar sus presupuestos antes del día 5 de julio si quieren mantener la categoría.
Cádiz juega el play off de ascenso, y Lucena y Real Jaén ya lo hicieron sin suerte, pero no tienen tienen su plaza asegurada, ni siquiera, en Segunda B. Por contra, el otro equipo que pugnó por el ascenso, la Real Balompédica Linense sí que tiene su plaza asegurada en la categoría de bronce del fútbol españo, debido a que la Balona es uno de los clubes más saneados de toda la categoría.
Por otra parte, todos los clubes que tengan deudas por liquidar en la presente temporada, las deberán hacer frente antes del 30 de junio, pues si no sufrirán un descenso administrativo, y bajarían directamente a Tercera División.
Esta es la lista de los equipos que tienen que presentar aval y la cantidad que tienen que poner antes del 5 de julio, y si no consiguen reunir el dinero correspondiente, también descenderán:
Tienen que avalar 200.000 euros: Alavés, Cacereño, Cádiz, Ceuta, Denia, Gandía, Real Jaén, Lucena, Melilla, Orihuela, Palencia, Puertollano, Roquetas, Sant Andreu, Rayo Vallecano B y Vecindario.
Y deben presentar un aval de 125.000 euros: RSD Alcalá, UD Alméria B, CD Badajoz, Caravaca/La Unión (descendido), Conquense, Guijuelo, Lemona, Mallorca B, Montañeros, Ontinyent y Zamora.
