JIM sabe que, en el fondo, Pedro Botelho es buen chico. El indulto al brasileño fue completo tras tres semanas fuera de las convocatorias por culpa de la escapada nocturna en Madrid, ha disfrutado en La Rosaleda de Málaga de su reintegración el equipo. No sólo entró en la convocatoria sino que jugó minutos en la segunda parte ante el Málaga.
Al llegar el el gol de Rondón, Juan Ignacio miró hacia el banquillo y el primer jugador en quien se fijó fue Pedro Botelho, quien relevó a Óscar Serrano. El marcador señalaba el minuto 57.
Por lo que se ve, el entrenador ex del Cartagena confió en que el brasileño aportaría más velocidad y desparpajo. En su vuelta al equipo, Botelho demostró que tiene ganas de enmendar su error extradeportivo.
Botelho, muy activo y voluntarioso, puso en ciertos apuros a la defensa del Málaga. De lo que no cabe duda es de que Juan Igancio guarda una confianza ciega en el joven carioca.
«Lo más importante en las personas es, cuando metemos la pata, saber sacarla. Estamos encantados. Ha dado un progreso en el aspecto físico», afirmó el técnico en el diario Las Provincias antes de visitar La Rosaleda.
