Nueve desplazamientos lleva acumulados el Cartagena sin adelantarse en el marcador, sin jugar con los números a su favor, en alguno de los nueve partidos que ha jugado desde entonces como visitantes.
Siempre ha tenido que jugar a contra corriente, unas veces por despistes, otras por el mejor juego del rival y en la mayoría de los casos por falta de intensidad en bastante de esos encuentros, un mal que le hemos visto con Borja Jiménez, con Pepe Aguilar y ahora con Luis Miguel Carrión en este partido de Las Palmas que, con diferencia, es el peor desde que el técnico catalán se hizo cargo del equipo en las pasadas navidades.
Desde entonces este Cartagena empataba en Girona (1-1), perdía en Castellón (2-0), Mirandés (4-1), empataba en Vallecas con el Rayo (0-0), ganaba en Málaga (1-2) después de ir perdiendo, volvían a caer en Alcorcón 82-1), Tenerife (3-0), un empate sin goles en Gijón ante el Sporting (0-0) y este nuevo batacazo en Las Palmas (2-0).
Son números la mar de preocupantes que, una de dos, o empiezan a mejorar ya o el otro camino todos sabemos a donde conduce.
El Cartagena defraudó por completo en su visita a Las Palmas, dónde cayó (2-0), goles que encajó en los primeros 18 minutos de juego. El conjunto blanquinegro ofreció una pésima imagen ante un rival al que le bastaron veinte minutos para desarbolar al equipo de Luis Miguel Carrión, que suma su segunda derrota en cinco partidos y no termina de dar con la tecla para mejorar el rendimiento de un equipo que ya suma su sexta jornada consecutiva en zona de descenso. Las Palmas llegaba a este choque después de tres derrotas consecutivas pero supo encarrilar desde el inicio una victoria que le aleja de cualquier fantasma. El Efesé sin embargo, vuelve a darle otro mazazo a la ilusión que había entre los seguidores cartageneristas por regresar con los tres puntos mientras sigue dando pasos hacia el abismo.
