Sobre el mismo campo del Sánchez Luengo un médico (Francisco Belda, que no es la primera vez que interviene en un hecho similar) y que presenciaba el encuentro intervino en primera instancia para auxiliar a Rafa, que recibió un masaje cardíaco. Minutos después se utilizaba un aparato desfibrilador radicado en el propio campo de fútbol algareño que ayudó sobremanera a la recuperación del jugador, aunque momentos antes la angustia se apoderó de los cerca de 500 espectadores que estaban en el recinto algareño.
Todo el mundo había olvidado que el CD Algar ganaba por 2-1 a la Minerva tras ir venciendo por 2-0. Rafa, en el flanco derecho de la defensa local y con la camiseta número 2, se desenvolvía con normalidad hasta que su corazón dejó de funcionar como debía. Llegó a sufrir -según se supo tras la intervención médica- hasta tres paradas cardíacas. Y el hecho de que estuviese jugando le benefició, según comentaron los facultativos en el Hospital de Santa Lucía donde cerda de las 22:00 horas se conoció el parte médico: pronóstico, a esperar las próximas horas pero con todo controlado. Su madre, viuda, sufría la desazón por el recuerdo de que su marido falleció por un accidente cardíaco.
REACCIÓN FAVORABLE Y UN RAYO DE LUZ
Antonio Jiménez, entrenador de la Minerva, afectado por la salud de Rafa a pie de campo.
La Guardia Civil de servicio en el recinto deportivo actuó, controló la situación pero la llegada de la Ambulancia del 061 tardaba en llegar y el público, nervioso y angustiado, se impacientó y protestó por la tardanza. Rafa fue trasladado al interior de la UCI Móvil y atendido convenientemente. El chico reaccionó de manera favorable después del gran sobresalto que aturdió a todos los espectadores y puso lágrimas en los ojos de compañeros de equipo, en los técnicos y de los del equipo alumbreño y de los directivos y personas ligadas a Rafa un futbolista veinteañero, unionense, que inmediatamente y entre los aplausos del público fue trasladado al Hospital de Santa Lucía en Cartagena y atendido en la UCI con pronóstico reservado.
Sportcartagena estuvo viviendo in situ en el Sánchez Luengo la angustiosa jornada que acabó con el encuentro en el minuto 31 ante el estado emocional de 'sohk' de futbolistas y público. Pedro Villada, directivo de la Minerva, expresó su extrema preocupación por lo ocurrido y confirmó que el partido quedaba suspendido por el árbitro Abellán Gil. Ya pasadas las 20:15 horas la Ambulancia salía rumbo al hospital cartagenero entre los aplausos de los espectadores de un hecho insólito. "Aquí nunca se había utilizado todavía el desfibrilador", comentó un consternado Antonio Pérez de Tudela, presidente del club algareño.
ANTECEDENTE EN TORRE PACHECO, RECUERDA PALOMEQUE
Carri llora sin consuelo al ver a Rafa desplomado y sin respiración en el partido El Algar-Minerva.
Manuel Palomeque,presente en el campo, por su parte recordaba que en Torre Pacheco, donde él entrena ahora, ocurrió no hace mucho un hecho similar con uso favorable del desfibrilador "que salvó la vida al chaval, y ahora se encuentra magníficamente".
Alonso Gómez López, director general de Deportes, que no estuvo en el encuentro inacabado, al conocer la noticia por Onda Regional (buen despliegue con Fernando Vera y Damián Medrano) se trasladó al Hospital de Santa Lucía y se ofreció a los familiares de Rafa en el plano oficial y particular. Más de medio centenar de jugadores y amigos de Rafa acudieron al centro hospitalario para interesarse por Rafa.
La alegría de uno de los goles algareños se turbó en el minuto 31 ante el episodio cardíaco que sufrió el compañero Rafa.
Estuvieron de espectadores en el Sánchez Luengo, por el FC Cartagena, Paco Belmonte y Manuel S. Breis, que soportaron el soponcio como todo el mundo en una tarde calurosa, de sol para tostar. Una tarde alucinante para un pueblo, el algareño, que se vistió de rojiblanco y sacó tambores y 'bubucelas' que desde el minuto 31 tuvieron que silenciar ahogados por la incertidubre del estado de salud del joven Rafa.
