La expedición cartagenerista tuvo que ‘tragarse’ los 840 kilómetros, ida y vuelta, que separan Cartagena de Ponferrada descartando la idea que tenían en el club de hacer el viaje cómodamente en un vuelo chárter el mismo día (sábado) con regreso tras el partido.
Sin embargo detalles técnicos relacionados con el vuelo que no han sido revelados y el coste económico que se incrementaba sensiblemente al tener que volar en la madrugada del sábado al domingo, con lo que suponía mantener abierta la pista de dos aeropuertos de provincias como el de León y el de Corvera pospusieron esta operación por lo que los futbolistas albinegros tuvieron que afrontar uno de los viajes más largos –y el más decisivo también- de toda la temporada.
El técnico cartagenerista también decidió que viajase la totalidad de la plantilla, excepto los lesionados Jesús Álvaro y Antonio López. Sí lo hicieron los sancionados Elady Zorrilla y Josua Mejías que, aunque en principio no podían jugar, al haber recurrido el club la tarjeta amarilla al comité de Apelación, se quiso mantener la esperanza para que el venezolano pudiese ser de la partida en Ponferrada.