miércoles. 24.04.2024

UCAM Murcia, primero, y después el Melilla

La Copa del Rey, en su primera eliminatoria, y la Liga, en su tercera jornada, hacen que el Cartagena tenga dos compromisos consecutivos en casa esta semana que despide agosto y estrena septiembre. Agosto ha podido dejar un regusto mejor para la familia blanquinegra, pero hay margen para agarrarse a la llamada ‘media inglesa’, que es sinónimo de éxito si se sabe mantenerla hasta la ronda 28.  El invento es así: vencer en casa y empatar fuera. Así hasta el aburrimiento pero asegura el liderato eterno y una entrada optimista  en el playoff.

El rocambolesco 3-3 en El Ejido es una anécdota que pudo oler a cuerno quemado si Moussa no le hubiese quitado hierro al ‘palo’ del 3-2 con su gol, después de ir ganando por 0-2. Todos o muchos coincidimos en que el plantel actual del Cartagena mejora el anterior y ya se está viendo que la capacidad atacante se expone al sol de la realidad, se tuesta y aun cuando sigue faltando material específico para que las ausencias no se noten demasiado. Si no se remedia la situación ya, lo que venga tendrá que llegar en enero de 2018. Pero las dudas se sitúan de medio campo hacia atrás, a la hora de defender.

 Montegaudo dice estar jodido (literalmente) pero, ¿cómo están los demás, el resto de aficionados que se  las prometen tan felices al intuir que  hay material para evitar pifias que hacen daño? Teniendo como se tiene los mejores futbolistas para echar el candado en el área. Las herramientas adecuadas –lo han demostrado los que están en la nómina, y ByB renovaron bien a los componentes del bloque, menos Gonzalo Verdú por otras circunstancias no muy bien conocidas. Y asimismo excepto Quique Rivero. Contando también con la polémica baja de Limones cuyo recambio lo tiene aún todo por demostrar.

La pretemporada de Pau Torres, por culpa de Luis César Sampedro, técnico del Valladolid,  no fue  normal

Desde luego no se le puede crucificar al nuevo portero porque la pretemporada de Pau Torres, por culpa de Luis César Sampedro, el técnico del Valladolid, que lo marginó, no ha sido normal contra su voluntad y de su calidad y currículum no hay que dudar, pero no hay garantía de que se encuentre al 90%. Ni al 75% tal vez. Mala suerte la de no mantener el portal a cero en sus dos primeras actuaciones. A Marcos Morales, por ser joven y hallarse en momento de aprender, no se le ha tenido en cuenta una buena pretemporada (correcto ante el Hércules en Pinatar Arena y después en el tiempo que le dieron en la Carabela de Playa), mejor precampaña que la de Pau Torres. Mas éste es de los jugadores que llegan a los clubes “para jugar fijo”, según los criterios encorsetados. El compañero competidor del titular ya puede parar cinco penaltis seguidos y hacer maravillas en los entrenamientos, que ser menor de 23 años tiene un  peaje a pagar y es el de seguir esperando.

Con este panorama de primeras incógnitas que sufren todos los equipos en mayor o menor medida,el Cartagena- que encaja demasiado y es su primer signo adverso que ha aparecido-  tiene en la Copa del Rey un adversario al que nunca le ha podido meter el diente. Jamás perdieron los universitarios ante los albinegros y da la casualidad que acuden el miércoles 30 líderes en la Liga, apurando al máximo el tiempo de los fichajes, y además su próximo partido liguero en La Condomina pintada de azul, el día 10, será ante los cartageneristas. Y antes, el 3 de septiembre, el  siempre animador Melilla en el Cartagonova. El año pasado el equipo norteafricano estuvo siete jornadas en puesto de play off, Se cargó a Josu Uribe con el conjunto bien clasificado y después con Moya no pudo alcanzar la promoción, tras la etapa en la que el portero Barrio lo paraba todo. La  posición más frecuente  de los melillenses el año pasado fue la de quinto y acabó sexto. Siempre son rivales difíciles.

Dos bonitos partidos en puertas en el Cartagonova. Con el encanto de poder apreciar si los errores se van corrigiendo tras una precampaña no excesivamente exigente, con la mayoría de adversarios de un nivel atacante bastante bajo. Tendrían que haber apretado mucho más los 'sparring'.

UCAM Murcia, primero, y después el Melilla
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