jueves. 28.03.2024

Glory, glory Efesé...

Guille Montoya, escritor y columnista de Sportcartagena tiempo atrás, residente en el extranjero, regresa a su tierra portuaria para cargar pilas antes de una nueva salida europea, y nos ha preparado uno de sus sabrosos comentarios, de vuelta al estadio Cartagonova y con el grato baño de fútbol del partido del Marbella.

Glory, glory Efesé... Cuando vuelves al estadio, después de mucho tiempo, piensas que todo será igual: desde el vendedor de pipas del puente hasta el final del partido. Ayer fue todo diferente. Había olvidado la emoción del fútbol en directo. Qué mejor momento para recordarla que un miércoles, (lo mejor de la vida sucede los miércoles) al igual que en mi película favorita: 'El gran miércoles'. Es la historia de la llegada de la gran ola, el momento más deseado para todo surfista. Y ayer llegó. Nada era igual.

El vendedor de pipas había ampliado el negocio y me saludó con su eterna, y gran, sonrisa. Ahora vende agua también. Pipas y agua son el complemento perfecto. El estadio por dentro ha cambiado también. Las bandas negras en la publicidad le dan otro aspecto. El equipo, aunque los tengo controlados, también era diferente. Y el final, el final fue apoteósico. Salir del estadio y escuchar, en el silencio de la noche, el himno de la Champions, fue el colofón a un gran miércoles, a un partido perfecto. Noche de Champions en Cartagena. No estaba en la programación de la UEFA, así que fue un privilegio para los afortunados que pudimos asistir.

El equipo desarrollló el mejor partido que había visto en mucho tiempo. El Marbella, que llegaba con todos sus números, fue otro espectador más. Fútbol. Fútbol de calidad. Fútbol que hace que pagar una entrada parezca un premio. Fútbol que hace que al salir del estadio la gente no haga un mal comentario (algo extremadamente complicado). Fútbol para una noche de Champions. Y me quedo con un nombre: Arturo. Necesitaba un partido así para los críticos. Necesitaba un partido así para él. El equipo necesitaba un partido suyo así.

El gran beneficiado es el equipo, no lo olvidemos. Arturo reinó... 'Glory, glory Man. United' es el estribillo del himno del glorioso equipo. Glory, glory Efesé sonaba en mi cabeza. No podía haber presenciado mejor espectáculo para volver al estadio junto con más de 6.000 personas. Pero mantengamos la emociones en su lugar y la cabeza en el suyo. No vamos a ganar todos los partidos así, no vamos a jugar así siempre, no estamos ascendidos por lo de ayer. Queda mucho, muchísimo, y la Segunda B es muy traicionera.

Disfrutemos del momento, eso sí, y cantemos sin parar: 'Glory, glory Efesé'...

Glory, glory Efesé...
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