Porque es verdad. No hay tiempo para más. Esto se acaba el domingo, esperemos que con el Cartagena en Segunda División. Tiempo ha tenido para lograrlo y conseguirlo a las primeras de cambio, pero no voy a incidir en ello. Tiempo ha tenido para haber hecho algún gol, siquiera a domicilio pero tampoco voy a incidir en ello, ni siquiera en el último partido jugado en el ‘Francisco de la Hera’ donde el Extremadura parecía un avión en el primer tiempo y el Cartagena una motocarro de las de antes de la guerra. Pero ya digo que eso es agua pasada que, de momento hay que dejarla aparcada.
Hay que hacerlo porque lo único que importa ahora es que el Cartagonova se llene, que Jesús Álvaro y Cordero se recuperen para este domingo, que Monteagudo tenga las ideas muy claras para lo que piense o pueda hacer, que el árbitro esté acertado y que la suerte, la dichosa suerte, esté por fin del lado blanquinegro. Que ya está bien por cierto, que ya está bien de que la suerte pase, aunque sea por una vez, por el portal albinegro.
El Cartagena volvió a quedarse sin marcar fuera en el playoff/RAÚL VELASCO-SCT
Si me pregunta alguien por lo que pienso yo confío en que se va a ascender. Seguramente, con mucho sufrimiento pero el Cartagena va a terminar lográndolo. Lo contrario, que también podría ocurrir, me decepcionaría profundamente y sería para hablarlo largo y tendido, pero eso ya digo que por ahora es harina de otro costal. Y lo es porque el ascenso está al alcance de la mano. Ascender en el Cartagonova es el sueño de muchos, yo diría que de cientos y puede que de miles de cartageneristas que no saben lo que supone una alegría que tendría proporciones bíblicas nunca vistas en Cartagena. Para que os hagáis una idea la última vez que se logró un ascenso fue en la temporada 1997/98, cuando el entonces Cartagonova le endosaba un 8-0 al Tortosa y lograba el ascenso a Segunda B, en donde permanece desde entonces con el efímero paso de tres temporadas por la Segunda A.
Quiero decir lo que quiero decir, que creo en el ascenso aunque no discuto sus dificultades y que sólo hay dos caminos a elegir, o se va al Cartagonova creyendo en el ascenso o te quedas tranquilamente en casa o en alguno de los cientos de bares que hay por Cartagena disfrutando con el no ascenso del equipo, si así acabase ocurriendo.
Esta es la última bala y hay que aprovecharla. No hay más. No va más. Dos goles separan al Cartagena de la Segunda División. Dos goles, noventa y tantos minutos –quien sabe si algunos más- y mucho sufrimiento. Yo, desde luego, sí pienso estar en el Cartagonova con mi gente suspirando por el ascenso.
¿Os acordáis de Louis Van Gaal? Aquel holandés que fue técnico del Barça y que hizo famosa aquella frase “tu positivoh, nunca negativoh”. Pues eso mismo digo yo, que siempre positivo.
El Cartagonova será el escenario definitivo este domingo de San Juan/SCT