El Jumilla CF ha estado gestionado de manera un tanto convulsa por un grupo empresarial llegado de Italia, con Nobile Capuani como presidente. A las primeras de cambio mantuvieron, en noviembre de 20154, un contencioso con Josico, entrenador, que abandonó el cargo forzado por la actitud Capuani aunque tenía firmado contrato hasta junio de 2017.
El técnico manchego debía percibir 80.000 euros, según dictaminó el Comité Jurisdiccional de la Federación Española.
Posteriormente la actuación del grupo italiano en la conducción del club no ha sido muy ortodoxa y a los jugadores a día de la fecha les adeudan tres mensualidades y hay pagos pendientes a la Seguridad Social.
La junta gestora cuenta con el visto bueno de la Federación Murciana de Fútbol y de la Dirección General de Deportes. Se ha comunicado este cambio de directiva al Ayuntamiento de Jumilla y a la Guardia Civil, en este último caso por las represalias que pudieran venir del anterior presidente Nobile Capuani y sus acompañantes, da cuenta El Eco de Jumilla.
Según Francisco Serrano, a finales de marzo la anterior junta directiva entró a vestuarios e impuso a la plantilla que un futbolista jugase a cambio de 20.000 euros de un grupo inversor, cantidad que se desconoce su procedencia. El nuevo presidente de la junta gestora ha indicado que la situación se precipitó el pasado domingo tras lo ocurrido en las horas previas al partido ante San Roque de Lepe donde Nobile Capuani impidió la entrada a los medios de comunicación y fijó una entrada única de diez euros por lo que los abonados tuvieron que pasar por taquilla.
Para el próximo encuentro, en casa, ante el Cádiz, la nueva gestora ha decidido que los abonados que acuden al campo de fútbol podrán ir acompañados de otra persona, con el fin de restituirle el daño causado en el encuentro anterior. Los medios de comunicación podrán entrar gratis a los partidos, ha dicho Francisco Serrano.
La taquilla ante el Real Murcia fue de 16.000 euros y se realizaron pagos por importe de 5.000 (entre ellos parte del alquiler de las gradas) y se desconocen donde están los 11.000 euros restantes, según Francisco Serrano, quien ha afirmado que cuenta con el apoyo de la plantilla ya que los jugadores le han prometido luchar para la salvación. No se cuenta con Walter Chiaraluce, que hacía las funciones de entrenador, para el partido ante el Linares y el club estudia la vuelta al equipo del delegado Jesús Sánchez que desde hace unas semanas no ejercía en el club ya que tiene pendiente de pago una deuda de la anterior junta directiva.
El próximo lunes se dará a conocer la nueva junta directiva de la que formarán parte los antiguos gestores del club ya que a final del campeonato deben convocarse elecciones a la presidencia tal y como se recoge en sus estatutos.
A fecha de hoy el Fútbol Club Jumilla tiene deudas que superan los 170.000 euros ya que se deben tres mensualidades a los jugadores (la nómina mensual es de 25.000 euros), así como a hoteles y pisos de alquiler, entre otros. A la Seguridad Social se adeudan 13.000 euros, según el nuevo presidente de la Junta Gestora.
EL CONTRATO DE JOSICO
El nuevo presidente de la junta gestora, que llegó al Jumilla, para resolver el caso “Josico” no reconoce la deuda del ex entrenador ya que ha afirmado: “que una federación resuelva el contrato entre un club y un deportista dejando de lado a la justicia me parece que no se puede asumir es inexplicable “. El contrato es falso, ha afirmado Francisco Serrano.
La secretaría del club ha remitido un escueto comunicado en el que se dice: “no es cierto esta información. Nunca se ha autorizado una nueva junta y desconfían a cualquier persona que hable en nombre del Fútbol Club Jumilla”.
