Pau Torres Riba, nacido en la localidad barcelonesa de Capellades el 4 de junio de 1987, es un guardameta que destaca por su seguridad y que aportará experiencia.
No en vano tiene una dilatada trayectoria fundamentalmente en el tercer escalón del fútbol nacional y, tras formarse en la cantera del Barça, se fue al Terrassa y posteriormente al Sant Andreu.
De Cataluña salió para irse al San Roque de Lepe y al Ceuta para regresar cerca de casa al fichar por el Lleida.
En la campaña 2015/2016 compitió en Segunda División con el Alavés y en la 2016/2017 con el Valladolid.
EL ESTIGMA DEL CERRO DEL ESPINO EN 2018
A la Región llegó la temporada siguiente al ser contratado por el Cartagena, con el que disputó la promoción de ascenso a Segunda. Fue quien se tragaría el gol en propia meta de Michel Zabaco en el Cerro del Espino en el minuto 97. Un estigma que le perseguirá de por vida porque fueron momentos tremendos, que nadie desea.
De nuevo llegó al Lleida, en el que pasó otras tres temporadas y de ahí pasó al Zamora, con el que disputó la Liga 2021/2022 en la Primera RFEF.