17 de octubre de 2012, 8:08
El jugador nigeriano, muy dado a comer hamburguesas y otros productos que poco o nada tienen que ver con la sabrosa cocina española, se ha puesto manos a la obra para perder al menos un par de kilos, que es lo exigido por su entrenador, Pato, para que esté en la línea cuanto antes.
Kaburu Akinsola es el primero en reconocer que ha llegado a Cartagena con sobrepeso, no demasiado pero con algún kilo de más. Tanto que al jugador se le conoce en sus ámbitos más cercanos como ‘Paquirrín’, una información que apareció reflejada en SPORTCARTAGENA y de la que el diario Ideal de Granada se hacía eco en su edición de este lunes.
Ahora, el nigeriano, está dispuesto a acabar con todo eso y para ello ha empezado sus ‘palizas’ diarias en el campo del Ciudad Jardín, donde se esfuerza al límite para ponerse en forma aunque él ya avisa de que en Granada entrenaba todos los días y que si el Rácing de Fabri lo desestimó no fue por un problema de kilos “sino porque no me entendía Fabri” dijo Akinsola en un castellano casi inentendible.
Lo que sí parece claro es que las hamburguesas se le han terminado al nigeriano, al menos durante un tiempo. En Granada ya nos dijo alguien muy próximo a su entorno que lo primero que tendría que hacer el Cartagena debería ser buscarle un buen endocrino.
Muchos de sus compañeros han bromeado con él en el vestuario sobre sus gustos culinarios y alguno hasta le ha llamado ‘Paquirrín’ de forma cariñosa. El reto es llegar a Cádiz sin esos dos kilos menos que Pato le ha exigido para estar en forma lo más rápido posible.
