Los últimos minutos de los partidos están condenando al Efesé, que está perdiendo demasiados puntos en las últimas jornadas. “Estamos encajando demasiado a balón parado. Hemos cambiado la forma de defender. Hemos hablado sobre ello. El balón parado es de estar muy concentrado siempre. Se nos han ido 7 puntos a balón parado y eso es duro. Si no lo corregimos será un problema grande”, explica Calero. En este sentido, “el balón parado también es jugar bien al fútbol y se nos va al traste todo el trabajo si no lo hacemos bien a balón parado. Así se ganan y se pierden partidos. Nos duele. Lo trabajamos y lo hemos comentado con los jugadores”, insiste.
En cuanto a la manera de afrontar el partido ante los asturianos “tengo clara la idea de partido que quiero. Ellos tienen unas condiciones especiales. Son el equipo en mejor forma de la categoría. Están con la flecha hacia arriba y va a ser complicado. Estamos lejos pero vemos la orilla. Lo único que vale es seguir y seguir. Este es el único camino. Los aficionados también tienen que seguir aunque sé que es duro para todos. Antes o después nos tiene que llegar ese golpe de fortuna que nos está faltando. Nos agarramos a eso”, destaca.
En el partido ante el Tenerife los albinegros no lograron cerrar el encuentro y se pagó desviado caro. “Las contras son importantísimas para matar el partido. Hemos fallado ahí y asumo la culpa. Me siento responsable. Entiendo que esto es el fútbol. Esperemos haber cumplido con el cupo de errores”, afirma
Sobre las sensaciones del técnico cartagenerista, “veo mejoría hoy. Después del partido fue un palo pero cuando pasan los días me agarro a la mejoría para continuar luchando. Hay que competir bien y apurar todas nuestras opciones. El equipo tiene que empezar a disfrutar compitiendo en el barro. Hay que saberse manejar en estas circunstancias aunque no sea fácil. Hemos demostrado que podemos competir con cualquiera”, destaca.
La suerte está dando la espalda al Efesé en muchos partidos. “Están pasando muchas cosas ilógicas a todos los niveles. Esto nunca me había pasado. Pero no hay que lamentarse. Hay que intentar tapar las vías de aguas más grandes. Estamos trabajando mucho en ello. Espero por fin darle una alegría a nuestra gente, que se la merecen. Tenemos que morir por ellos”, explica.
El Sporting está en una gran dinámica. “Todos los rivales son difíciles. Tenemos que ser más contundentes y tener personalidad para competir durante todo el partido. Nos consideramos un rival digno y competitivo para ganar a cualquiera”, concluye.
