“En la primera parte hemos estado muy mal en todas las facetas, además de que el Elche estuvo muy bien. Lo único que hicimos bien fue defendernos porque eso nos mantuvo vivos para afrontar con garantías la segunda. Si hubiera podido, en el descanso hubiera cambiado a los once jugadores”.
El técnico madrileño, que tras el intermedio llevó a cabo tres cambios de golpe en busca de revertir la situación, aseguró que en el descanso “estuvimos hablando seriamente y luego cogimos el toro por los cuernos”. Pese a la importancia de los tres puntos y de que el equipo contabilice ya cinco partidos consecutivos sin conocer la derrota en Liga, Calero aseguró que “estábamos en la UVI entubados, y ahora ya nos hemos quitado los tubos. Seguimos ahí y nos queda mucho trabajo por delante, pero el dejar de ser últimos es un espaldarazo importante para todos porque ya se está viendo el fruto del trabajo diario”.