El apoyo de las varias decenas de jóvenes seguidores cartageneristas se hizo notar en Las Rozas, hasta dónde viajó un autobús repleto de aficionados, que estuvieron animando al equipo de Pepe Aguilar de principio a fin, para que se sintiesen como si estuvieran en casa.
A pesar de que los seguidores del CD Quintanar eran muy superiores en número, los tambores de apoyo de los jóvenes aficionados cartageneristas estuvieron sonando durante toda la tarde, hasta que finalizó el choque con la algarabía que eso supuso para todos los que procedían desde Cartagena.