Este domingo marcó dos, de penalti y con maestría. Lo que es, un maestro del gol
El canario ya está por donde solía, entre los mejores artilleros de la categoría, de momento ya lo es del Cartagena gracias a sus cuatro goles, el doblete frente al Lugo y el doblete nuevamente ante el Ibiza, esta vez de penalti los dos pero lanzados con absolutamente toda la maestría que siempre transmite el ‘pichichi’ cartagenerista que, jornada a jornada, sigue agrandando su leyenda.
Además de los dos goles Rubén Castro estuvo muy, pero que muy cerca de haber marcado otros dos más, un mano a mano en el primer tiempo con el meta Parreño que le ganaría la partida en el último instante y en la segunda mitad con otro mano a mano que, con Parreño en el suelo le dio tiempo al cancerbero insular a que se repusiera y acabase robándole la pelota.
Lo que parece muy claro es que Rubén ha vuelto aunque en realidad nunca llegó a irse en esas primeras jornadas donde solo la mala suerte le impidió haberse estrenado mucho antes. Mucho nos tememos que Rubén todavía tiene mucho que decir esta temporada con los goles, en los que es todo un especialista.
