4 de septiembre de 2011, 22:50
El entrenador del filial blaugrana analizó el partido:
"el Cartagena ha tenido muchos cambios importantes, y está en un proceso de renovación, lo que siempre requiere un tiempo. Habían perdido el primer partido y están en esa etapa de formación. El inicio ha sido disputado, pero nos ha venido muy bien marcar los dos primeros goles. El espacio a nuestra espalda lo hemos aprovechado bien. De mi equipo valoraría que hemos tenido la tranquilidad para hacer nuestro juego".
Hizo énfasis en destacar a un jugador suyo, Grimaldo, de quince años:
"este es el ejemplo de los jugadores de la casa, que independientemente de su edad se forjan en el fútbol base, cogiendo los conceptos del club, y al final demuestran que se adaptan. Grimaldo es un chaval con muy buena mentalidad y que tiene que seguir trabajando".
Ante la pregunta de qué destacaría del Cartagena, el míster culé tardó unos segundos en responder, pero al final lo hizo:
"el Cartagena estaba con dos jugadores menos e indudablemente quizá podíamos haber ampliado el marcador. El Cartagena se ha dedicado a defender, estando más en posición. Estoy contento con mi equipo, y quizá haya que pedirle más, pero no cabe ningún 'pero' al trabajo de mis jugadores. No era un partido fácil para ellos, pero destacaría que a pesar del resultado se han mantenido firmes en cuanto a trabajo y lucha. Eso denota que es un equipo con espíritu y carácter".
Sobre las expulsiones, se mostró diplomático:
"no las he visto".