Pocas veces un gol marcado en el estadio Cartagonova se escuchó tanto como el tercero que lograría el equipo albinegro por mediación del chileno cedido por el Cádiz, Narváez.
Sonó tanto por la importancia que tenía y sus más que probables repercusiones, como así acabaría ocurriendo con un Efesé que se coloca a cinco puntos de la salvación -que sería lo más parecido a un ‘milagro’- que ya empieza a verse de nuevo como una posibilidad real.
En los bares de la zona de la Alameda, calle del Carmen, Puerta de Murcia nos llegan noticias de clientes que se encontraban por esos lugares que la repercusión fue tal que hubo gente que se lanzó a la calle, cerveza en mano, celebrándolo. Por Ciudad Jardín, muchos de los bares que tienen terraza acabaron cionvertidos en una fiesta tras ese gol, lo más parecido a un temblor que sacudió a ‘media Cartagena’, tan necesitada de alegrías como la de este domingo que acabaría siendo genial.
En bares y en algunas discoteca también se anunciaba el gol como algo propio, señal de lo pendiente que se estaba en la ciudad de este trascendental encuentro