¿Os acordáis de aquel Efesé-Leganés de la pasada temporada que se acabó con 1-2 para el equipo ‘pepinero’? Aquel mediodía Caparrós Hernández, con el VAR divagando, pasó casi cinco minutos para invalidad el gol del Cartagena que habría supuesto el 2-2 en el marcador.
Este viernes noche, en Zaragoza, dio todo un festival en contra del Efesé. Poco o nada que objetar a la expulsión de Jairo, acabó dando un gol al Zaragoza que debió de haberse anulado porque hubo falta sobre Lizoain, independientemente de que sea o no en el área chica. Pero hubo falta y no la quiso ver.
En el segundo acto le perdonaría una segunda cartulina amarilla al zaragocista Iván Azón por falta clara sobre un futbolista albinegro. Sin embargo, no dudaría en expulsar con una roja directa al preparador cartagenerista Julián Calero simplemente por darse este la vuelta, cerrar los puños y mascullar para sí mismo, según redactó el propio colegiado en el acta.
La guinda estuvo a punto de ser anular el gol de Fontán buscando en el VAR un fuera de juego inexistente. Curiosamente, a pesar de todas estas jugadas, salió muy criticado por la propia afición aragonesa así que es fácil imaginarse, para quien no vio el partido, como fue su actuación de nefasta.