domingo. 19.05.2024

Bueno… ¿y ahora qué?

Queridos amigos cartageneristas, los que peinamos canas (yo pocas, por cierto) y hemos vivido una y mil batallas promocionarias, -desde la grada, eso sí-, la mayoría de la veces, -por no decir casi siempre-, con unas enormes decepciones y no exagero lo más mínimo, pienso, a mi modo de ver...
Queridos amigos cartageneristas, los que peinamos canas (yo pocas, por cierto) y hemos vivido una y mil batallas promocionarias, -desde la grada, eso sí-, la mayoría de la veces, -por no decir casi siempre-, con unas enormes decepciones y no exagero lo más mínimo, pienso, a mi modo de ver que, esta temporada, salvo milagro, -el cual siempre espero con todo mi corazón-, la campaña va finalizar el próximo domingo.

No obstante, como me considero un cartagenerista visceral, futbolísticamente hablando, no pierdo la esperanza y quisiera pensar en una de esas poquísimas tardes gloriosas de nuestro actual F. C. Cartagena, y ello, nos diera paso, el próximo lunes, a incluirnos en el caprichoso bombo federativo. Así es que, como no pierdo la esperanza, me gustaría que no fuera éste mi último artículo de la presente campaña y que renaciésemos con mucha más fuerza que lo que hemos vivido hasta hoy.

Pero como no parece que el destino y el hacer del equipo vaya a cambiar de un modo sustancial, al menos en un futuro inmediato, -salvo que, sus actuales dueños, tirasen la casa por la ventana-, simplemente aconsejaría a esa sufrida y constante afición, aunque no muy numerosa, -si me admiten un consejo de “veterano en esta guerras”-, que no se entristezcan y desanimen ante tales “garrotazos”, sino todo lo contrario, que traten de valorar lo positivo que pudiera, o pudiese, tener la actual situación, pudiendo asegurarles, con todo el cariño y respeto que se merecen, -pues es una experiencia muy personal-, que este cambio de perspectiva resulta, final del camino, bastante más saludable; a mí, realmente, me ha ido muy bien, dentro del disgusto que no me lo quita nadie, ¡eso sí!, y pensar en las cosas positivas, -que las hubo y muchas-, de cara a lo pudiera venir en adelante y resignarse con su sino (pero nunca dejar de luchar). 

Y termino por hoy, porque no quiero hacerme pesado, quizás con un tono no tan esperanzador como otras veces, aunque siempre, -repito-, esperando el milagro, sabiendo que, -el fútbol-, es algo muy peculiar y original y, a veces su grandeza, da grandes sorpresas. En eso confío.

¡Hasta la próxima amigos, salud y suerte, como siempre!

Bueno… ¿y ahora qué?
El usuario es responsable de sus comentarios. Se compromete a que no difamen, insulten, contengan información falsa, abusiva, pornográfica, amenazadora, que dañe la imagen de terceras personas o que infrinja alguna ley.
Sportcartagena se reserva el derecho de eliminar los comentarios que considere inadecuados.
Comentarios