jueves. 02.05.2024

Continuará la travesía del desierto…

De nuevo, en el infierno de la 2ª división B. Más claro, ¡agua!. Y parece que fue ayer, el triste desenlace del anterior descenso; pues bien, ya ha pasado, nada más y nada menos que un año: un triste año, aunque nuestra posición en la tabla, haya sido la mayor...
De nuevo, en el infierno de la 2ª división B. Más claro, ¡agua!. Y parece que fue ayer, el triste desenlace del anterior descenso; pues bien, ya ha pasado, nada más y nada menos que un año: un triste año, aunque nuestra posición en la tabla, haya sido la mayor parte de la temporada, inmejorable; pero sólo en cuanto a posición se refiere, porque en cuanto a juego, Vds. me dirán…
 
Dicho esto y viendo la situación, parece una película donde, esta vez, ganan los malos, dígase en el buen sentido de la palabra o sentido figurado, como se le quiera llamar, porque cualquier aficionado cartagenerista que se precie, se rasgará las vestiduras, por no decir, coger una cuerda y ahorcarse. Me explicaré sin pelos en la lengua, un Real Murcia en tremendas dificultades deportivas desde el inicio de liga y un Cartagena, líder de su categoría, -categoría de cartón- eso sí, con todos los respetos para el cartón y así ha ido sucediendo en casi todos los tramos de la reciente temporada que acaba de terminar; pero al final, todo al revés, ni una a derechas.
 
Pero voy más lejos, ¿Vds se explican el final de esta película?, pues bien, este films termina de la peor forma posible para los intereses cartageneristas.  El Real Murcia del Sr. Samper, permanece y el Cartagena F.C. del Sr. Gómez, no asciende. No volverá a haber derby (triste consuelo) la próxima temporada, pero en las peores condiciones; porque, podía no haber habido, pero en unas condiciones que salieran a pedir de boca del aficionado aladroque; pero no, eso nunca ocurrirá, o será realmente difícil que suceda. ¡Estas negativas situaciones, sólo nos pueden ocurrir a nosotros, a nuestro pupas-Cartagena, del Sr. Gómez!.
 
Hace unos años, -pocos, por cierto-, vimos aquel descenso murcianista y, en la temporada siguiente, ¡zas!, nuevo ascenso; pero nosotros no, no tenemos esa suerte. Y me pregunto, ¿cúantos años nos costará, esta vez, la travesía?. ¿Seremos capaces de retornar relativamente pronto?. Espero, y deseo, que así sea. Es momento, una vez pasadas estas “caudalosas fechas”, que se reactive y reorganice la situación. Si quieren que la afición se empiece a ilusionar, hay que arrancar ya, sin prisas, pero sin pausas. Se necesita una buena e ilusionante campaña de captación de socios, para que las cifras no bajen ostensiblemente, porque si no…, ¡ya me dirán!; y por otra parte, haciendo las cosas bien, -que, evidentemente, se pueden hacer-, luego, el que quiera ir que vaya y el que no, pues peor para él. Un servidor continuará yendo, si Dios quiere, siempre que haga buen tiempo y cuando haga malo…, ¡pues también!, faltaría más.
 
Esperaremos, pues, con impaciencia, ver cómo se desarrolla la venidera situación, repitiendo, de nuevo, que espero y deseo, se realice de la mejor forma posible para el bien del fútbol de la categoría ¿más elevada?, ya que a los otros equipos cartageneros, lo único que hay que hacer -con mayúsculas-, es dar la enhorabuena por los ascensos conseguidos y haber tenido el privilegio de haber dado las únicas alegrías futbolísticas, léase, Cartagena-Efesé y Cartagena-Dolorense. ¡Enhorabuena, repito, para ellos y muchísima suerte también, a ambos, en la venidera campaña!.
¡Hasta la próxima amigos, salud y suerte, como siempre!.

Continuará la travesía del desierto…
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