Es normal que empiecen a llegar las primeras dudas, porque el Cartagena solito ha tirado por la borda gran parte de las opciones de estar ahora mismo en una situación mucho más cómoda, es decir, de estar primeros. Está claro que si el árbitro del pasado domingo no hubiera sido de silbato fácil en el minuto 93, y Cañadas hubiera culminado en gol una jugada que a todas luces – y vista por la tele – parece legal 100%, estaríamos hablando de otra cosa. Sin embargo, la sensación es que en estos últimos cuatro partidos el Cartagena ha sido responsable de llegar en desventaja en la disputa con el Jaén.
Todo puede pasar en la última jornada, pero los albinegros no sólo juegan en el Cartagonova y en La Victoria, también lo hacen en Sevilla. Allí, se enfrentan un Sevilla At. sin nada que hacer y un Albacete del que depende el San Fernando para meterse en liguilla. Los andaluces necesitan una derrota manchega para que una hipotética victoria ante el Jaén les sirviera para meterse en play off. Pero… ¿qué ocurriría si el Albacete se pone por delante en Sevilla muy pronto? Con esas noticias en mente, ¿el San Fernando iría honradamente a por la victoria en Jaén o habría pacto de buena amistad, tan usual en otras Comunidades? (Desde luego no aquí…)
En cualquier caso, el Cartagena debe olvidarse de eso en este domingo. Una vez llegados a este punto no se puede hacer otra cosa que ganar al Cacereño y esperar que todo se conjure a su favor. Si algo han demostrado albinegros y jienenses es que el liderato les quema, y en esa situación se vuelven irregulares. Pero en el peor de los escenarios, el Cartagena estará en el bombo de sorteo de play off el próximo lunes a las 4 y media. Por el camino largo, que no deja de ser estar en los cuartos de final de la Champions del ascenso. Ganar y esperar; ganar y esperar… No queda otra.
