12 de febrero de 2012, 11:54
Y en este caso espero que así sea, ya que visto lo visto, si descontamos la 1ª mitad de lo ocurrido en el Miniestadio barcelonista, la 2ª parte, se podría considerar aceptable, si contamos con la injusta inferioridad numérica. Lo del arbitraje, mejor no comentar ¿para qué?; porque todavía no entiendo muy bien, cómo continúa en el ejercicio del arbitraje, este Sr., con el beneplácito de las autoridades en materia arbitral. ¡Casi que sólo le faltó amonestar al conductor del autobús…!, en un partido en el que no existió, en absoluto, violencia.
Pero vamos a lo positivo que, pese al 4 a 0, lo hubo. Como antes menciono, quizás se puede salvar esa segunda mitad, por las formas observadas, incluso con uno menos. Para mí el equipo, fue otro; eso sí, continúa la negación ante el gol (cuestión fundamental para huir de la “quema”); pero ahora mismo, es decir, a partir de ¡ya!, debemos de atenernos a lo que viene, lo próximo, y lo próximo, olvidando, -si es posible-, todo lo anterior, son las 18 auténticas finales que se avecinan. ¡Ahí está la salvación!, no le demos más vueltas; y aún así, de esas 18, podrán perderse algunas, pero para lograr los ansiados “famosos” 50 puntos (quizás, esta campaña, puedan ser algunos menos), para estar más seguros, repito, deberemos amarrar el medio centenar.
Todo ello empieza, el sábado, con el C. D. Sabadell y terminará en el estadio Colombino de Huelva; ahora es cuando no tenemos que venirnos abajo y es cuando verdaderamente deberemos estar ahí. Es la ocasión, si se deja escapar, perderemos lo que tanto nos costó lograr.
Por todo ello, aunque la situación se vea oscura, nada de negativismos. Lo pasado, pasado. Imaginemos que empezamos esta liga (18 jornadas) que va a ser más larga que esos 10 últimos partidos que siempre puso de ejemplo el Sr. Aragonés; tenemos por delante 8 interesantísimas jornadas más, para poder salir del atolladero y contra los equipos que, precisamente, están buscando lo mismo que el nuestro. Ilusión, por lo visto, no le va a faltar al Sr. Ríos; veremos si a los verdaderos protagonistas les ocurre lo mismo y se les contagia ese optimismo del míster. ¡Esperemos que así sea!
¡Hasta la próxima amigos, salud y suerte…!
Pero vamos a lo positivo que, pese al 4 a 0, lo hubo. Como antes menciono, quizás se puede salvar esa segunda mitad, por las formas observadas, incluso con uno menos. Para mí el equipo, fue otro; eso sí, continúa la negación ante el gol (cuestión fundamental para huir de la “quema”); pero ahora mismo, es decir, a partir de ¡ya!, debemos de atenernos a lo que viene, lo próximo, y lo próximo, olvidando, -si es posible-, todo lo anterior, son las 18 auténticas finales que se avecinan. ¡Ahí está la salvación!, no le demos más vueltas; y aún así, de esas 18, podrán perderse algunas, pero para lograr los ansiados “famosos” 50 puntos (quizás, esta campaña, puedan ser algunos menos), para estar más seguros, repito, deberemos amarrar el medio centenar.
Todo ello empieza, el sábado, con el C. D. Sabadell y terminará en el estadio Colombino de Huelva; ahora es cuando no tenemos que venirnos abajo y es cuando verdaderamente deberemos estar ahí. Es la ocasión, si se deja escapar, perderemos lo que tanto nos costó lograr.
Por todo ello, aunque la situación se vea oscura, nada de negativismos. Lo pasado, pasado. Imaginemos que empezamos esta liga (18 jornadas) que va a ser más larga que esos 10 últimos partidos que siempre puso de ejemplo el Sr. Aragonés; tenemos por delante 8 interesantísimas jornadas más, para poder salir del atolladero y contra los equipos que, precisamente, están buscando lo mismo que el nuestro. Ilusión, por lo visto, no le va a faltar al Sr. Ríos; veremos si a los verdaderos protagonistas les ocurre lo mismo y se les contagia ese optimismo del míster. ¡Esperemos que así sea!
¡Hasta la próxima amigos, salud y suerte…!
