Nacido hace 77 años y ‘bazanero’ de toda la vida, Almiñana dedicó más de la mitad de su vida al fútbol base de Cartagena. Tras colgar las botas como jugador en activo pasó a los banquillos y de ahí a las labores de directivo. La vida de Almiñana ha estado ligada a la EF Ciudad Jardín, club al que llevó a lo más alto en categoría juvenil, la División de Honor, y por el que pasaron miles de jugadores que hoy lloran su muerte. Paco, que en 2013 dejaba de estar activo en tareas administrativas del club, era de esa clase de personas que se hacían de querer y que era capaz de tirarse horas saludando a los que fueron sus futbolistas con los que era habitual verle hablar de las andanzas del club prácticamente desde su inauguración.
El apellido Almiñana siempre será sinómino de fútbol en la ciudad, ya que su hijo, Fran, decidió seguir sus pasos hasta llegar a ser jugador del primer equipo de la ciudad, tras lo cual emprendió su camino como entrenador con gran éxito. Dos de sus nietos, Alberto y Alejandro, siguen a día de hoy ligados al balompié, uno como delantero y el otro como árbitro de categoría regional, además de su nieta Daniela Almiñana, jugadora del Dolorense.
Paco Almiñana, casado con Maribel y padre de tres hijos (un chico y dos chicas), sufría desde hacía años una enfermedad que le obligaba a pasar por el hospital de vez en cuando “pero ya he pasado otra vez la ITV y aquí estoy, como siempre”. Son palabras de un hombre al que era habitual verle en la cantina del campo de Ciudad Jardín, el cual por cierto, y durante una campaña llevada a cabo durante el pasado año, decenas de aficionados recogieron firmas para que el campo de esta barriada llevada el nombre de Paco Almiñana.
El cuerpo de Paco Almiñana estará siendo velado durante todo este jueves en la sala 1 del Tanatorio Estavesa y la misa por su eterno descanso se llevará a cabo este viernes a partir de las 09.30 horas en la capilla del mencionado Tanatorio.