viernes. 26.04.2024
Sin entrar en el penalti, que estaba muy cerca de la jugada, el madrileño  Sergio Pérez Muley tuvo decisiones bastante discutidas. Por ejemplo expulsó a Fernando en el minuto 85 porque el blanquinegro rozó con su cuerpo a un defensa, mostrándole la segunda tarjeta y la consiguiente expulsión.

Minutos antes sin embargo perdonaría la segunda cartulina amarilla a Julio, quien acababa de ver una primera por tocar el balón con la mano. 

En apenas unos minutos volvería a tocar el balón con las manos y, aunque el colegiado lo vio, prefirió mirar a otro lado para no tener que expulsarle. Al morenito Akrong tampoco quiso mostrarle la segunda tarjeta a pesar de que el jugador africano hizo numerosas faltas merecedoras de alguna que otra tarjeta.

Al final salió entre pitos y su actuación fue bastante protestada. Tevenet, entrenador  albinegro, se descolgaría al final diciendo que tenía la sensación de que en Cartagena los árbitros pitan demasiado fácil. Razón no le falta.

El arbitraje de Pérez Muley tuvo decisiones determinantes
El usuario es responsable de sus comentarios. Se compromete a que no difamen, insulten, contengan información falsa, abusiva, pornográfica, amenazadora, que dañe la imagen de terceras personas o que infrinja alguna ley.
Sportcartagena se reserva el derecho de eliminar los comentarios que considere inadecuados.
Comentarios