viernes. 26.04.2024
DESTACADO JUGADOR DEL CARTAGENA A FINALES DE LOS 70

Azurmendi supera un cáncer que parecía terminal y visita a sus amigos en Cartagena

MANUEL ÁNGEL Sólo había que verle disfrutar este viernes por la tarde junto a sus amigos de siempre, Ricardo Ciudad y Pedro Arango, jugando al dominó en la cantina del estadio Cartagonova. Porque Antón Azurmendi, 70 años, vuelve a sonreír. El que fuera excelente central de aquel Efesé que llegó a ser campeón de España...

MANUEL ÁNGEL

Sólo había que verle disfrutar este viernes por la tarde junto a sus amigos de siempre, Ricardo Ciudad y Pedro Arango, jugando al dominó en la cantina del estadio Cartagonova. Porque Antón Azurmendi, 70 años, vuelve a sonreír. El que fuera excelente central de aquel Efesé que llegó a ser campeón de España de aficionados ha superado un cáncer de estómago que los médicos le diagnosticaron en 2013 como terminal. No sólo se ha recuperado y ha vencido a la enfermedad sino que presenta su mismo estado alegre que siempre le caracterizó.

Junto al vasco Azurmendi estaban, entre otros, Perico Arango y Ricardo Ciudad. Compartieron recuerdos y alegrías durante toda la tarde después de mucho tiempo sin pasar por la que él considera su segunda casa, Cartagena. Azurmendi reside en Vitoria pero tiene un hijo y un nieto cartagenero y su trabajo, hasta su jubilación, siempre estuvo vinculado a Relesa Galvame.

Antón no se cree aún que haya superado el trance. "Llegué a perder casi 30 kilos y estuve mal de verdad. Pero aquí estoy, nuevo por completo y dispuesto a durar muchos años” dice con la mejor de sus sonrisas mientras mueve ficha en el dominó. "Lo que tuve fue un cáncer que me lo diagnosticaron como terminal, pero no me conformé, visité a muchos médicos hasta que al final decidieron operarme y aquí estoy. Todo salió a la perfección”.

Recordamos algunos de sus tantos más brillantes en el desaparecido campo del Almarjal. Antón tenía un disparo tremendo y suyos fueron goles preciosos que aún están en la retina de los aficionados más veteranos. Tenía una gran zancada y mucho estilo en su juego además de ser un jugador noble y limpio. En Cartagena no hay duda que dejó huella.

Azurmendi pasó por numerosos equipos. Empezó en el Alavés de dónde pasó al Burgos, Real Oviedo previo traspaso por 750.000 pesetas de entonces, Langreo (cedido), Ceuta (4 años, donde conoció a Ricardo Ciudad, otro histórico a posteriori del Efesé) Yeclano y Cartagena, tres años y medio y en donde acabaría como profesional.

Luego fue secretario técnico durante media temporada y mientras ejercía como croupier –entonces una profesión novedosa en el Casino que había instalado en el hotel Doblemar de La Manga- mataba el gusanillo del fútbol jugando por todos los equipos de la zona. De esa manera se mantuvo activo hasta los 42 años "ya ni me acuerdo cuando me retiré de verdad, pero jugué más tarde en el Bala Azul, Mazarrón, La Manga y la Minera” recuerda ‘el vasco’.

No verá al Cartagena pero se ha informado de forma concienzuda. "No te imaginas como lamento en la posición en la que está el Cartagena, sólo le deseo lo mejor de lo mejor. Que todo acabe bien y que vuelva a ser el que fue” pide antes de regresar a su Vitoria aunque no sin antes decir que piensa volver en el mes de agosto para el ya tradicional Memorial ‘Ginés Pagán’ que cada mes de agosto se celebra en las instalaciones del ‘Gómez Meseguer’.

Antes de la despedida aún hubo tiempo para una rápida sesión de fotos junto a sus amigos del alma Ricardo Ciudad y Perico Arango, en la entrada principal del Cartagonova, desde donde nos manda "un fuerte abrazo para todos mis amigos y para toda la afición de Cartagena, a la que le deseo lo mejor de lo mejor”.

Azurmendi supera un cáncer que parecía terminal y visita a sus amigos en Cartagena
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