23 de julio de 2009, 2:00
En el caso de Cygán, que estuvo la pasada semana visitando tanto el Cartagonova como La Manga Club, aún espera un esfuerzo albinegro, que se va a producir a la vez que el francés también está dispuesto a rebajar sus pretensiones y en el caso de Ballesta aún quiere esperar algunos días antes de aceptar la oferta ideada por Juan Ignacio Martínez.
Tanto Cygán como Salva Ballesta aún pueden ser blanquinegros. Las opciones son cada vez mayores aunque en el caso de este último también está la posibilidad de fichar a otro ilustre de la Segunda A, el delantero sevillano Marcos Márquez, que acaba de causar baja en la UD Las Palmas y tampoco sería un mal refuerzo. Pero Juan Ignacio Martínez lo tiene claro como el agua. Si puede ser, que sean Cygan y Ballesta y si no es así, ya veremos.
Pero JIM lo tiene claro en su círculo futbolístico más íntimo con lo que la apuesta y la oferta sigue en pie. Tan firme o quizás más que hace unos días una vez que el director deportivo del Albacete despejaba cualquier duda diciendo públicamente que el nuevo técnico albacetense, Pepe Murcia, cuenta con el murciano Toché.
Con Salva Ballesta la operación sigue siendo distinta. Juan Ignacio también lo quiere a toda costa, antes que Marcos Márquez. Pero hay que esperar al menos una semana, hasta que el delantero tenga claro si llega alguna oferta de Primera interesante o, por el contrario, apueste por lo que le llegue desde Segunda A. El Cartagena ha sido de los primeros en tantearla, el presidente Paco Gómez se jacta de ser amigo de Salva y éste sabe muy bien que es objeto de deseo.
Entre las ofertas que maneja Ballesta hay una desde Grecia y otra desde Estados Unidos. Pero el jugador quiere seguir en España, a ser posible en Primera. Entrena por su cuenta y se lo quiere tomar con relativa calma. También sabe que las ofertas no siempre van a estar ahí y la del Cartagena, por lo que sabemos, es bastante buena.
Tanto Cygán como Salva Ballesta aún pueden ser blanquinegros. Las opciones son cada vez mayores aunque en el caso de este último también está la posibilidad de fichar a otro ilustre de la Segunda A, el delantero sevillano Marcos Márquez, que acaba de causar baja en la UD Las Palmas y tampoco sería un mal refuerzo. Pero Juan Ignacio Martínez lo tiene claro como el agua. Si puede ser, que sean Cygan y Ballesta y si no es así, ya veremos.
Pero JIM lo tiene claro en su círculo futbolístico más íntimo con lo que la apuesta y la oferta sigue en pie. Tan firme o quizás más que hace unos días una vez que el director deportivo del Albacete despejaba cualquier duda diciendo públicamente que el nuevo técnico albacetense, Pepe Murcia, cuenta con el murciano Toché.
Con Salva Ballesta la operación sigue siendo distinta. Juan Ignacio también lo quiere a toda costa, antes que Marcos Márquez. Pero hay que esperar al menos una semana, hasta que el delantero tenga claro si llega alguna oferta de Primera interesante o, por el contrario, apueste por lo que le llegue desde Segunda A. El Cartagena ha sido de los primeros en tantearla, el presidente Paco Gómez se jacta de ser amigo de Salva y éste sabe muy bien que es objeto de deseo.
Entre las ofertas que maneja Ballesta hay una desde Grecia y otra desde Estados Unidos. Pero el jugador quiere seguir en España, a ser posible en Primera. Entrena por su cuenta y se lo quiere tomar con relativa calma. También sabe que las ofertas no siempre van a estar ahí y la del Cartagena, por lo que sabemos, es bastante buena.
