FICHA TÉCNICA
FC CARTAGENA: Marc Martínez, Iván Calero, Alcalá, Gonzalo Verdú, Jairo Izquierdo, Damián Musto, Tomás Alarcón (Cellou, minuto 87), Andy Rodríguez (Jony Álamo, minuto 87), Luis Muñoz (Juanjo Narváez, minuto 32), Alfredo Ortuño (Mikel Rico, minuto 76) e Iván Ayllón (Lauterano, minuto 76).
Banquillo: Raúl Lizoain (p.s.), Jhafets (p.s.), Kiko Olivas, Jony Álamo, Mikel Rico, Umaro Embaló, Lautaro, Cellou y Juanjo Narváez.
VILLARREAL B: Íker Álvarez, Tasende, Del Moral, Carlo (Daniel Requena, minuto 83), Forés, Ontiveros, Pascual (Andrés Ferrari, minuto 86), Lekovic (Espigares, minuto 76), Lanchi (Aitor Gelardo, minuto 90), Iñíguez y Rodrigo (Diego Collado, minuto 76).
Banquillo: Miguel Morro (p.s.), Espigares, Abraham, Marcos Sánchez, Aitor Gelardo, Daniel Reque, Geralnik, Diego Collado y Andrés Ferrari.
GOLES: 0-1. Minuto 39: Ontiveros, de penalti. 1-1. Minuto 57: Ortuño, de penalti. 2-1. Minuto 69: Alberto del Moral, en propia meta. 3-1. Minuto 72: Juanjo Narváez. 4-1. Minuto 82: Tomás Alarcón.
ÁRBITRO: Ávalos Barrera, adscrito al comité catalán. Mostró cartulina amarilla a los locales Marc Martínez y Tomás Alarcón y a los visitantes Rodrigo y Ontiveros.
INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la vigésimo segunda jornada de Liga que se disputa en el estadio Municipal Cartagonova. Poco más de cinco mil espectadores en tarde fria y con viento desagradable.
LA CRÓNICA
Por J. A. González Paredes
Imágenes : Andy Céspedes (FCC)
Ver para creer. Y es que lo que protagonizó el FC Cartagena en el primer partido de la segunda vuelta de la Liga ante el Villarreal B es digno de elogio; fue como la noche y el día. La oscuridad en una primera parte para olvidar en la que solo un lanzamiento al saque de una falta directa del debutante Andy Rodríguez llevó el peligro a la meta visitante y una claridad tremenda en la segunda en la que los hombres de Julián Calero no solo no fueron capaces de darle la vuelta al marcador sino que además ofrecieron un fútbol de mucho sentido y efectividad.
El entrenador madrileño del Cartagena presentó un once inicial con la presencia de Andy Rodríguez por primera vez como albinegro y con una dupla en ataque formada por Iván Ayllón y Alfredo Ortuño, dos jugadores de claro carácter ofensivo que no hacía más que dejar clara su intención desde el primer momento: encarrilar cuanto antes el choque para sumar tres puntos fundamentales en la pelea por la permanencia.
Pero nada de eso ocurrió porque el filial amarillo pronto se hizo con la parcela ancha del terreno de juego y fue el que llevó el peso del partido y del aspecto ofensivo en el juego.
El Cartagena andaba perdido porque además la distancia entre líneas era desmesurada y en contadas ocasiones sus hombres de ataque eran capacer de ver cómo les llegaban balones. Sin nada que reseñar durante la primera media hora de juego, pasado este tiempo una mala salida del meta albinegro Marc Martínez hizo que el meta derribara dentro del área a Forés y el colegiado señalara la pena máxima. Visto lo visto era justo que el Villarreal B obtuviera algún premio a su mejor hacer en el marcador y lo hizo después de que Ontiveros aprovechara el penalti para estrenar el marcador.
Al filo del descanso, una falta directa ejecutada con pierna zurda por Andy Rodríguez se estrelló en el palo de la meta visitante en la única acción de peligro del equipo albinegro en el primer periodo.
No pintaba nada bien la segunda parte para el FC Cartagena que tenía que mejor, y mucho, para evitar que el cuadro castellonense fuera capaz de llevarse los tres puntos. Pero lo grande que tiene esto del fútbol quedó patente en la rreanudación. Un equipo motivado, luchador, agüerrido, peleón, con carácter y, sobre todo, con fortuna de cara al marco contrario. Ese fue el Cartagena que todo esperábamos y que a los 56 minutos lograba el empate tras un penalti cometido sobre Iván Ayllón y que Alfredo Ortuño se encargó de transformar. A partir de ahí todo fue sobre ruedas, ya que en apenas veinticinco minutos los de Calero lograban golear al Villarreal B con goles de Del Moral en propia meta; de Juanjo Narváez y de Tomás Alarcón ante el delirio de una afición que no se creía lo que estaba haciendo su equipo.
Ahora, los albinegros se acercan un poco más hacia la zona de salvación pese a que aún queda toda una segunda vuelta por jugar.
