Luis Carrión sabe que tiene mucho trabajo por delante y que este FC Cartagena ha reunido un buen plantel, pero que tampoco le han puesto en sus manos al Bayer Munich.
El equipo se está terminando de construir y sus dirigentes tienen que ir de cabeza buscando lo que necesitan que, visto por esa parte, tampoco tiene que ser fácil el acertar.
Es obvio que no vamos a tener otra vez la suerte de que nos caigan una pareja de centrales tipo Raúl Navas y Datcovik, pero que la afición cartagenerista los va a echar en falta eso es seguro.
De ahí que el técnico barcelonés leve toda la semana dándole vueltas a los cambios que seguramente va a presentar el equipo albinegro en relación al primer partido. El Almeria es mucho Almería pero si encima se encuentra con dos regalos más la pelota que Marc Martínez le deja al belga Ramanazi para que volviese a enfriar los ánimos con el 1-3 definitivo.
En el entrenamiento de este jueves en el Cartagonova se ha visto a Luis Carrión sonriente, optimista pero también con ganas de corregir algunas de las muchas cuestiones de su equipo, que ofreció una primera parte lamentable con futbolistas que se suponen importantes que se perdieron en la inmensidad del terreno de juego tras el 0-2. Y eso es lo que no puede ser. Eso y que la defensa sea de merengue.
A poco más de una semana para que se cierre la ventana de fichajes de verano en el Cartagena tienen muy claro lo que necesitan. Más que necesitar es algo que urge. El foco se vuelve a poner en determinados futbolistas, de ahí que Luis Carrión quiera darle un giro a la situación. Más importante que marcar goles es que no te los marquen y en el Cartagena ya hay experiencia de sobra en ese sentido.
