4 de julio de 2022, 12:29
En la capital costasoleña el diario Sur habla de que la oferta malacitana seduce al veterano goleador mientras en el Efesé no solo callan, sino que están urdiendo con todas las prisas un plan B que, según Ángel García, buen periodista donde los haya a la hora de hablar de bajas y de altas en el fútbol español, pasaría por el fichaje de otro veterano, Fernando Llorente, quien ha quedado libre en el Éibar.
De esta manera todos los focos siguen puestos en la decisión final que pueda adoptar RC7 que, ante tanto dinero junto por la que muy probablemente pueda ser su última temporada en activo, termine cediendo. Al menos, en Málaga cada vez están más convencidos conforme van pasando las horas y el futbolista se mantiene con la boca cerrada. Los plazos de los que tantas veces han hablado Belmonte y Breis para que el gran canario respondiese no se están cumpliendo ni de cerca y el par de dirigentes cartageneristas se están enfrentando a uno de sus peores momentos en cuestión ficheril.
Si finalmente Rubén Castro se marchase al Málaga es evidente que el mundo seguiría rodando y el Cartagena continuaría con su marcha, aunque con la pérdida en potencia de un buen montón de goles que, de entrada, no es fácil de solucionar. Los 700.000 euros aunque otras fuentes periodísticas malagueñas, muy próximas al club de La Rosaleda, elevan la apuesta hasta los 800.000 ‘pavos’ ampliable a una segunda temporada si se cumplen una serie de objetivos. RC7 no para de darle vueltas.
Es de lo que ahora mismo se habla en Málaga, una cifra del todo imposible que puedan ser, rebatidos siquiera, por este Efesé que se habría fijado en Fernando Llorente a tenor de la información que se ofrece en Cazurreando. Llorente estaría encima de la mesa siempre que salga Castro perro sus números son raquíticos y sería más un golpe de efecto que otra cosa. Dos goles y una asistencia en 20 partidos suena a casi nada para un delantero de la talla de Llorente.
De todos modos en el Cartagena no dan por perdido a Rubén Castro porque hay dudas en torno a si se trata de alguna estrategia, no se sabe si del jugador, del representante del jugador o del propio club malacitano aunque la prensa afín al régimen esté arrimando el ascua a la sardina. Los que más cerca están no ven saliendo a RC7 de Cartagena pero también es cierto que el goleador, si algo ha demostrado a lo largo de su carrera, es que no se mueve por sentimentalismos a la hora de cambar de equipos.
Las miradas y los focos están puestos en él, en RC7, que a sus 41 años, se lo siguen rifando.
