Por el club blanquinegro han desfilado futbolistas de muchas nacionalidades: belgas, franceses, húngaros, portugueses, paraguayos, argentinos, ingleses, italianos, suizos, uruguayos pero un japonés nunca. Hemos buscado y hemos encontrado que por el fútbol español, desde finales del pasado siglo XX, ya han desfilado hasta 17 jugadores, todos ellos seguidos en mayor o menor medida desde Japón.
Probablemente el fichaje de Okazaki por el Efesé ha puesto a Cartagena en el mapa para miles de japoneses aficionados al fútbol. Hay que tener en cuenta que, con Okazaki incluido, hemos contabilizado hasta 17 futbolistas nipones que, unos más y otros menos, han triunfado o han gustado en el fútbol español. Vienen de un fútbol distante lo que les hace ser distintos también y aportan cosas diferentes.
La presentación de Oka como jugador blanquinegro puede considerarse como la que más ‘glamour’ ha tenido de cuantos futbolistas han pasado por la sala de prensa del Cartagonova en los últimos tiempos para ser presentado. Su presencia en Cartagena abre de par en par las puertas a un mercado potencialmente buenísimo como es el japonés.
De hecho, la plataforma de televisión WOWOW que ya estuvo en su puesta de largo como cartagenerista, le ha hecho un seguimiento de su debut en Oviedo para verse en todo Japón. Okazaki debutaba en Oviedo y su estreno de cartagenerista fue seguido en directo desde Japón. ‘Oka’ es un jugador querido por sus seguidores, ha participado.
TODOS LOS JAPONESES ‘ESPAÑOLES’
A continuación hacemos un resumen de los 17 futbolistas japoneses que han desfilado por España hasta la fecha, salvo error u omisión.
Nobuyuki Zaizen: llegó a finales de los años 90 para jugar en Primera Divisió. (Logroñés) Lo hizo en el viejo campo de Las Gaunas. Fue de los primeros y pasó casi desapercibido.
Sotaro Yasunaga jugó en el Racing de Ferrol, también a finales del siglo XX. Primero estuvo en el Lleida y de allí pasaría al Racing de Ferrol convertido entonces, por aquella época, en una Torre de Babel de nacionalidades
Shoji Jo (Real Valladolid) Primera División. Jugó 15 partidos y marcó 2 goles. Tuvo una grave lesión y tuvo que marcharse.
Akinori Nishizawa. Fichó por el Espanyol pero Paco Flores, el entrenador, no lo quiso, decía que no tenía nivel. Solo jugó 4 partidos y su paso estuvo más cerca de la pena que de la gloria.
Este japonés con cara de niño fue el que se la lió al Real Madrid en aquella final Intercontinental de 2016 cuando jugaba en el modesto equipo a la vez que sorprendente Kashima Antlers
Yoshito Okubo. Llegó al Mallorca en la 204/05. Hizo una gran segunda vuelta que le valiiósu renovación con 25 partidos y un rendimiento bastante irregular en su segunda temporada con los mallorquinistas, que acabaron dándole la baja.
Kenji Fukuda. Jugó en tres equipos de España desde 2006, en el Castellón en Segunda B, Numancia y Las Palmas estos dos en Segunda A, pero antes lo hizo en el Pachuca e Irapuato mexicano y en el Gauaraní de Paraguay. Se consideraba como un auténtico aventurero.
Shunsuke Nakamura (Espanyol) en 2009. 12 partidos y cero goles. Un fracaso. No aportó nada. Nakamura fracasaría en toda regla como ‘periquito’-
Nakamura, un fracaso en toda regla en las filas del Espanyol. Jugó cuatro partidos y fue un 'bluff'
Akihiro Ienaga ‘Aki’ (Mallorca. Llegó en el mercado de invierno de 2011 y estuvo hasta 2013,Fue el que se la lió al Real Madrid en aquella final Intercontinental de 2016 cuando jugaba en el modesto equipo a la vez que sorprendente Kashima Antlers
Mike Havernaar. Era un gigante japonés de casi dos metros y rasgos poco orientales. Lo firmaría Pedro Cordero cuando el Córdoba subió a Primera División en 2’014 (ahopra está en Segunda RFEF). Su padre, curiosamente, era un holandés que había emigrado al país del Sol Naciente.
Ibusuki Hiroshi: Este japonés jugaría en el Girona, Zaragoza B, Sabadell, Sevilla Atlético y Valencia Mestalla, pero no llegaría más arriba.
Takashi Inui: El Éibar acertó de pleno con el fichaje de Inui en el verano de 2015. Jugó también en el Betis, Alavés y vuelta al Éibar. Considerado como el mejor de todos los japoneses que han desfilado por España. Triunfó plenamente en todos los equipos en los que estuvo.
Hiroshi Kiyotake: Lo fichó el Sevilla en 2016 que llegó a pagarle al Hannover 96 alemán 6,5 millones de euros, pero no salió bien. Se marchó en el invierno de 2017 al aducir problemas personales.
Era un gigante japonés de casi dos metros y rasgos poco orientales. Lo firmaría Pedro Cordero cuando el Córdoba subió a Primera División en 2’014
Gaku Shibasaki: Fue el que se la lió al Real Madrid en aquella final Intercontinental de 2016 cuando jugaba en el modesto equipo a la vez que sorprendente Kashima Antlers. Llegó a ponerle contra las cuerdas en Tokio. El Tenerife lo ficharía poco después para dar luego el salto al Getafe y después al Deportivo de La Coruña y al Leganés.
Yosuke Ideguchi: Fichó por el Leeds United en 2018 que lo cedería a la Cultural Leonesa la temporada que jugó en Segunda en esa temporada. Nada o poco reseñable.
Shinji Kagawa: Un futbolista de los considerados Top con un alto salario que lo ficharía el Real Zaragoza en 2019 para la Segunda División. Prefirió cambiar a todo un Borussia Dortmund por jugar en España en Segunda y eso que el Manchester United había pagado un traspaso importante años atrás.
Okazaki: También llegó a España en el verano de 2019 después de haber sido campeón con aquel sorprendente Leiscester en 2016 cuando se proclamaría campeón de la Premier. El ahora cartagenerista estaba en aquel equipo mágico que compuso el italiano Rainieri. Fichó por el Málaga con el que apenas estuvo unos meses para acabar en el Huesca, con un año en Primera. El resto los ha jugado siempre en la Liga Smartbank.
Daisuke Suzuki: Central japonés jugó tres años en el Nàstic de Tarragona, entre 2015 y 2018. Llegó a jugar casi 70 partidos.
Take Kubo: Jugador del Real Madrid lo ha cedido en dos etapas distintas al Mallorca, al Villarreal y Getafe. Tiene bastante talento.
