9 de marzo de 2010, 1:00
El pronóstico meteorológico avanza la posibilidad de lluvias la tarde noche del próximo viernes 12 de marzo en Cartagena, que es cuando se estrena el fútbol oficial en el quinto día de la semana, una innovación impuesta con la Liga en marcha. Los clubes no han tenido arte ni parte en este asunto.
La jornada del viernes puede presentar una temperatura máxima de 11 grados y mínima de 8 grados, con viento de 35 kilómetros por hora. En principio el pronóstico indica que podría llover con más fuerza por la tarde que por la noche.
Ante el Real Unión de Irún la lluvia fue casi constante. Posteriormente ante el Betis no llovió como en la visita de los guipuzcoanos. Se recordará que el partido fue matinal y que la lluvia fue más bien intermitente. Ante el salamanca también ocurrió algo muy parecido con la lluvia.
La única realidad es que, con o sin lluvias, el FC Cartagena está forzado a resolver el encuentro con el Cádiz para frenar los ímpulsos de los equipos que le persiguen en la tabla de clasificación. La idea de mantener a raya a los perseguidores anida en la mente de los cartageneristas. En esa línea parece imprescindible superar a los cadistas, ocupantes de una peligrosa posición en la tabla clasificatoria.
La jornada del viernes puede presentar una temperatura máxima de 11 grados y mínima de 8 grados, con viento de 35 kilómetros por hora. En principio el pronóstico indica que podría llover con más fuerza por la tarde que por la noche.
Ante el Real Unión de Irún la lluvia fue casi constante. Posteriormente ante el Betis no llovió como en la visita de los guipuzcoanos. Se recordará que el partido fue matinal y que la lluvia fue más bien intermitente. Ante el salamanca también ocurrió algo muy parecido con la lluvia.
La única realidad es que, con o sin lluvias, el FC Cartagena está forzado a resolver el encuentro con el Cádiz para frenar los ímpulsos de los equipos que le persiguen en la tabla de clasificación. La idea de mantener a raya a los perseguidores anida en la mente de los cartageneristas. En esa línea parece imprescindible superar a los cadistas, ocupantes de una peligrosa posición en la tabla clasificatoria.
