16 de octubre de 2014, 11:38
M. A.
En el FCC esperan a Ribas para este fin de semana y el propio Julio César Ribas quiere estar en el Cartagonova para ver el Cartagena-Almería. Es lo que se dice de puertas para dentro. Pero, de puertas hacia afuera, nadie sabe nada como nadie supo con exactitud ni el día ni a la hora que Ribas despego hacia Montevideo. Sin embargo Javier Marco, el presidente cartagenenrista, sí reconoce estar y haber estado en contacto diario con el manager general albinegro que incluso llegó a dictar los cambios vía teléfono desde Montevideo en aquel encuentro dónde los cartageneristas acabaron abochornados en Lorca.
La realidad es que Ribas es esperado como agua de mayo para conocer su actitud, su situación y para comprobar si vuelve con todos los papeles en regla y si acabará lo que para muchos es considerado como una ‘pèrsecución’.
El uruguayo, que voló hacia su país en la semana del 7 al 14 de septiembre, tras el choque con el UCAM y antes de jugarse en Lorca, solamente ha visto al Cartagena en los tres primeros partidos de Liga –este domingo se disputará la jornada 9- con lo que se habrá perdido, en el más amplio sentido de la palabra, cinco partidos de Liga.
Pero con Ribas en Cartagena el camino no va a ser un paseo de rosas para el técnico uruguayo. El Cenafe, por ejemplo, entró hace unos días en contacto con este diario a través de un mensaje remitido por email en el que venían a pedir colaboración para conocer, de primera mano, el trabajo diario de Ribas.
Otros ojos, como los de la Federación Española de Fútbol a través de su Comité Nacional de Entrenadores, también va a estar muy pendiente de cuanto ocurra y hasta la Federación de Fútbol de Murcia tendrá que estar mucho más presta de lo que hasta ahora, según ha reconocido a este diario digital el propio presidente federativo José Luis Monje, quien sigue desde el primer momento está confusa situación, incluso con reuniones que no han trascendido.
La situación de Ribas está en entredicho desde hace semanas y ni siquiera en el club se atreven a decir cual será su verdadera función ya que el presidente del CENAFE va a vigilar "de forma muy estrecha” todos los movimientos que se hagan desde el club, incluso la situación que vaya a ocupar el propio Ribas en los partidos. Si se coloca cerca del banquillo será grabado, han afirmado estas fuentes.
La realidad es que Ribas está bajo la lupa y con la interrogante sobre su cabeza acerca de cual será su función y cómo la llevará a cabo en el FCC, un club en el que, en definitiva, el uruguayo ha invertido dinero de su propio bolsillo.
