Kiko Olivas sufre una rotura fibrilar en el bíceps femoral de la pierna derecha. Así se le ha diagnosticado en el día de hoy tras las pruebas realizadas en el Hospital Centro Médico Virgen de la Caridad. Se trata de una lesión importante que puede atrasar bastante el debut del veterano central en el eje de la defensa.

El central del Real Valladolid sufrió en su día una de las peores lesiones que puede padecer un futbolista en su carrera profesional: rotura en el ligamento cruzado anterior, lesión en el cuerpo menisco externo, esguince de grado I en el ligamento colateral lateral y un edema óseo en el cóndilo femoral externo. Llegó a estar ocho meses de baja, lo cual implicó que se tuvo que perder toda la primera vuelta de la temporada 2020/2021.
El central del Real Valladolid, Kiko Olivas, quien fue operado el 31 de julio del 2020, tras sufrir esa grave lesión en Ipurua, pudo regresar a los entrenamientos tras más de seis meses de recuperación. Esa temporada la perdería prácticamente por completo ya que hasta finales de abril no pudo reaparecer jugando en Primera. Llegó a perderse hasta 47 partidos por culpa de aquella lesión.
Ahora a Kiko Olivas no le queda otra que volver a recordar sus tiempos con el fisioterapeuta y el gimnasio aunque, por fortuna, la lesión no es tan grave como entonces pero sí un contratiempo importante a tan pocos días para el inicio de la Liga,
