Escandell, tal y como se preveía, no seguirá vistiendo la camiseta del FC Cartagena. Desde que acabó la pasada campaña, y tras el ascenso a Primera División de la UD Las Palmas, el conjunto canario puso su mirada en el valenciano para reforzar su portería tras la magnífica campaña que había efectuado con los albinegros. Pero surgía entonces el gran problema: Escandell seguía teniendo contrato con el Efesé hasta junio de 2024 y su cláusula de rescisión rondaba los 500.000 euros, cantidad que los insulares no estaban dispuestos a pagar.
Tras dos meses de largas y continuas negociaciones entre ambas partes; del deseo del futbolista por volver a Primera; y sobre todo, de las últimas declaraciones de uno de los responsables de la agencia de representación del jugador, en las que aseguraba que la cabeza del valenciano estaba puesta en Las Palmas y que, incluso, le costaba conciliar el sueño por no poder llevarse a cabo el traspaso, el final estaba más que cantado.
De hecho, y con el acuerdo total entre ambos clubes, Escandell se desplazaba hasta Estepona el mismo lunes por la tarde para incorporarse a los entrenamientos de su nuevo equipo.
Horas más tarde, el futbolista hacía público un comunicado en el que mostraba su gratitud tanto al FC Cartagena como a la afición por la acogida y el cariño recibido como blanquinegro.