Según fuentes muy fiables y próximas al club blanquinegro este señor viene cobrando unos 5.000 euros como mínimo desde que fue nombrado como tal a principios de la temporada 2022. Lo curioso, según nos confirman muchos de los padres que suelen acudir a diario por las instalaciones de Ciudad Jardín es que este dirigente, bombero con plaza en el Parque de Los Alcázares, ni siquiera aparece ni por este campo ni por muchos otros..

Hace un tiempo, cuando ‘sólo’ era coordinador deportivo de las secciones polideportivas del Efesé, decía en una de las escasas entrevistas que le han hecho que no iba a vender humo y que solamente quería que la cantera estuviera bajo un mismo escudo. A noviembre actual la sección de balonmano ha desaparecido, la de voleibol puede seguirle los pasos si no se desvincula antes del club y el baloncesto funciona porque tiene financiación propia. Todo lo demás es un desastre.

El filial Cartagena B va camino del descenso de categoría y con el juvenil de División de Honor ocurre lo mismo. Quien hablaba de un cálculo de más de 5.000 deportistas bajo el paraguas del FC Cartagena se ha quedado todo en un ‘bluf’, un castillo de naipes que se desmorona al mismo tiempo que su hermano. Por Ciudad Jardín, el único que aparece de uvas a peras es el auto nombrado ‘mejor director deportivo de la historia’ en el Cartagena, el fracasado Manuel Sánchez Breis y porque un hijo suyo juega en los alevines porque, de no ser asi, ni eso. Belmonte ni se sabe la última vez que cruzó el umbral del campo de Ciudad Jardín.
Mientras que con Isidoro García, que jamás ha cobrado un céntimo, crecieron todas las bases, desde la llegada de Mariano Belmonte es una desidia lo que reina en esas instalaciones y no tiene visos de que se arregle de inmediato.
La cara de Mariano casi no la conocen la mayoría de los canteranos mientras crece el malestar entre padres y madres por la cantidad de dinero que, temporada tras temporada, tienen que desembolsar por las equipaciones.