SPORTCARTAGENA
La de este verano supone la segunda vez que Pedro Cordero se queda a las puertas de entrar en el FC Cartagena. Ya en junio de 2013 estuvo a punto de tomar las riendas de la entidad alquilándosela a Paco Gómez, pero finalmente el de Jacarilla se decidió por continuar, poniendo a Fran de Paula al frente de las operaciones, a la espera de un oferta de compra por parte de otro inversor. De ese modo, el proyecto que los Cordero preparaban con el auspicio de Quique Pina se quedó en agua de borrajas.
En los últimos días, Pedro y su hermano Juan Carlos Cordero volvieron a salir a la luz pública, postulándose como alternativa cuando el grupo de Paco Belmonte se pensaba su continuidad. Así lo declararon además en SPORTCARTAGENA, e intensificaron sus movimientos en las últimas horas para tratar de quedarse con la entidad. Trascendió una reunión mantenida con el nuevo alcalde, José López, en la que le explicaron el proyecto que pretendían poner en marcha. Los datos ahí están.
Pero, de nuevo, como ya les ocurriera en verano de 2013, se quedan a las puertas de gestionar el club de su ciudad tras conocerse de manera oficial las intenciones de Belmonte de continuar al frente del FC Cartagena. Los Cordero, que ya tenían preparada su alternativa para permitir la continuidad del club, deberán aguardar a mejor oportunidad. ¿A la tercera irá la vencida? Eso es lo que desean muchos cartageneros a los que, sin menospreciar el trabajo del actual gestor, les gustaría ver lo que el binomio Pedro-Juan Carlos serían capaces de hacer con el Cartagena, con la ayuda siempre importante de Quique Pina.
Seguramente, su aparición en público habrá contribuido para añadir presión a los ya nuevos gestores del club a la hora de tomar decisiones. Futbolisticamente los Cordero (y Pina) siempre han sido los grandes deseados y (seguramente también) cuando el tiempo los ponga en el Cartagena harán un buen trabajo. Es gente válida. De la que merece la pena. Y es una bala que el fútbol y la afición cartagenera sigue teniendo en la recámara. Por ahora es la opción de lo que pudo ser y no será. De momento. Pero sólo es cuestión de tiempo porque los Cordero (y probablemente Pina también) acabarán desembarcando en el Cartagena.
