“El partido ha tenido dos partes muy diferenciadas. En la primera hemos controlado bastante bien al rival y hemos tenido ocasiones, pero nos ha faltado concretar más en los metros finales. En la segunda parte sabíamos que el Valladolid nos iba a empujar un poco más y por eso buscamos reducir un poco el ritmo del partido con los cambios. Sin embargo, la lesión de Luis Muñoz nos obligó a variarlo todo y pasamos a un 4-1-4-1 buscando la velocidad de Embaló para generar situaciones de contra”.
Cinco derrotas en seis partidos. Los números son claros. Pese a todo, Víctor Sánchez del Amo está tranquilo. “El equipo trabaja bien; el equipo compite; el equipo nunca baja los brazos pero está claro que en esta categoría y en un partido tan igualado como este una sola acción te marca la diferencia, y eso es lo que nos ha pasado a nosotros”.