25 de abril de 2014, 11:32
Este contraste tiene base en que el Cádiz quiere que sus jugadores estén alentados por su público hasta en los entrenamientos y por ello deja abiertas las puertas de acceso al campo de juego del estadio Carranza.
El Cartagena mantiene el criterio, también muy respetable, de cuidar el ensayo de las estrategias sin que haya testigos. Y así viene actuando desde hace meses en el recinto de la rambla de Benipila.